LA GUERRA DE LOS MUNDOS

[email protected]

Luego del ataque a las Torres Gemelas del 11 de setiembre de 2001, era fácil prever la presencia de cientos de películas donde se reconstruyera la trama alrededor del recordado suceso, como ocurrió con Vietnam.

Sin embargo la sensibilidad nacional fue tal que ni siquiera los empresarios del show se atrevieron a representar el asunto. Los filmes que tocaron el incidente lo hicieron de manera sutil, con mensajes entrelíneas como: "Señales" o "La hora 25", y las versiones del "Hombre araña" y la reciente "Batman inicia".

Terroristas

"¿Son los terroristas?", pregunta Dakota Fanning, quien interpreta a la hija de Tom Cruise. La interrogante plantea en forma directa la razón simbólica de toda la cinta. El libro fue escrito por H.G. Wells en 1898 cuando en Inglaterra la presencia del imperio del Kaiser hacía temer una guerra (que luego llegaría).

La primera versión cinematográfica ocurrió en 1953 momento en que la guerra fría y la amenaza comunista se hacía cada vez más latente. La famosa transmisión radial de Orson Welles fue en 1938, a un año del inicio de la segunda guerra mundial.

Como se puede apreciar no es antojadiza -en este momento histórico en particular-, la película de Spielberg, hombre con un sentido de la oportunidad único.

Estamos en contacto

El director de Tiburón ha construido su filmografía con el concepto siempre latente de la familia como gran eje de toda la sociedad. Es una familia americana la que mantiene con vida a ET; es por una familia destruida que el personaje de Tom Cruise motiva sus actos en "Sentencia previa"; la solidaridad con una madre que pierde los hijos en la guerra, dan razón a "Rescatando al soldado Ryan".

En la "Guerra de los mundos", en líneas generales Spielberg fue respetuoso con el texto original, aggiornando algunos conceptos como el protagonismo de los hijos de Ray Ferrier (Tom Cruise) que en el libro no son más que una referencia pasajera. La historia, entonces, se centra en la familia y las dificultades de una relación disfuncional entre padre e hijos.

Un hombre que se siente ajeno a la paternidad debe aceptar su destino y lograr que los niños lo asuman como su sangre. Mientras los invasores destruyen la tierra, Ray lucha por romper la barrera de los mundos que lo separan con su descendencia.

El objeto del ataque

Es atendible la sutileza de no usar la palabra marcianos en ningún momento, término ya anacrónico.

Hay dos cambios que pueden ser objetados respecto a la obra original. Uno, la manera en que se hacen presentes los extraterrestres en nuestro planeta y el otro punto mucho más discutible, es la escena previa al desenlace, única en donde el personaje principal tiene un gesto heroico que hace perder homogeneidad a la cinta y puede llevar a una mala interpretación del final.

La película es altamente dinámica y atrapa de principio a fin. El aturdidor sonido del pop dentro de la sala, rápidamente se silencia gracias a la propuesta cinematográfica y eso es un buen indicador del objetivo logrado por parte del director.

En líneas generales las actuaciones son correctas, con aplausos especiales para la pequeña Dakota Fanning, quien ya se destacara al lado de Sean Penn en "Mi nombre es Sam" (Jessy Nelson, 2001) y para Tim Robbins, ganador del Oscar por "Río Místico" (Clint Eastwood, 2003), siempre una fortuna su presencia.

Es cierto, no hay mayores sorpresas en el filme, es una historia conocida y repetida. Es cierto, los efectos especiales por sí solos ya no llenan butacas. Es cierto que rechina la carga política implícita en varias de estas películas, en donde EEUU salva al mundo un 4 de Julio. Todo fácilmente cotejable.

Pero así y todo, el director logra que el producto sea atractivo gracias a su oficio de narrador de historias. Sabe contarlas y dosificar los tiempos de acción y emoción como hace 30 años lo viene haciendo. Una agresión, la angustia, el repliegue, la reacción y al final la familia, que es lo primero y eso Spielberg bien lo sabe. El germen de la salvación.

[email protected]