Contenido creado por Laura Meléndez
Salud

Desde la base

Desarrollan una piel artificial para curar úlceras del pie diabético

Con el objetivo de disminuir las amputaciones a consecuencia de un mal control de la diabetes, una investigadora mexicana desarrolla un sustituto de piel de origen polimérico que ayuda a curar las úlceras del pie diabético.

26.02.2015 10:41

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2015-02-26T10:41:00-03:00
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El desarrollo creado en el Centro de Investigación en Ciencias Médicas (Cicmed) de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex), es semejante a un parche o malla de hidrogel, diseñado para colocarse encima de heridas recién diagnosticadas, superficiales, o incluso lesiones causadas por quemaduras y ayudar a los procesos de cicatrización en aproximadamente un mes.

Este sustituto de piel es un biomaterial de consistencia gelatinosa elaborado a base de dos polímeros: el polietilenglicol cuyas características físicas y químicas lo hacen biocompatible con el cuerpo humano; y el quitosano que es capaz de promover la adhesión celular, la regeneración de la piel, además de tener una acción bactericida, según informa Dicyt.

La especialista en biomateriales e ingeniería de tejidos Miriam Verónica Flores Merino explicó que a fin de verificar la efectividad del sustituto de piel y su seguridad, se realizaron análisis fisicoquímicos y cultivos celulares (células de fibroblastos), donde se demostró que ambos polímeros son biocompatibles y que no tienen efectos negativos contra el organismo humano. También se practicaron exámenes mecánicos con el fin de obtener los datos de resistencia y elasticidad de ellos.

Posteriormente se realizaron pruebas in vitro y en modelos murinos, donde se indujo la enfermedad a ratones, a los que les realizaron pequeñas incisiones, (porque ellos no desarrollan úlceras), con el propósito de comprobar el tiempo en que se regeneraban las heridas al colocarles la malla del sustituto de piel.

Flores, quien también pertenece al Sistema Nacional de Investigadores Nivel I, explicó que la efectividad del biomaterial depende de la concentración de ambos polímeros, ya que se complementan y cada uno suple las desventajas del otro, por ello se buscó la mejor combinación, a fin de crear un sustituto de piel más efectivo.

Al momento de buscar una conjuntar ambos polímeros, se destacó la importancia de las propiedades del quitosano, ya que provee el efecto bactericida y promueve la regeneración, sin embargo, al provenir de una fuente natural como lo es la quitina (elemento aislado de la concha de crustáceos) es más difícil moldear sus propiedades. Para remediarlo, se explotó la capacidad del polietilenglicol para hacer el sustituto de piel compatible.

La investigadora del Cicmed comentó que el siguiente paso de la investigación es enfocarse en realizar un número mayor de pruebas en cultivos celulares, así como en modelos in vivo y pruebas en voluntarios humanos, además de verificar su tratamiento en lesiones más profundas. Con esas bases científicas se pensará en patentarlo y comercializarlo.