Esta vez Sandler nos regala un "remake" de la cinta "Mr. Deeds Goes To Town", tomando el papel protagónico que una vez interpretara Gary Cooper.
Si aquella versión original ya era empalagosa y previsible, ésta lo es todavía más. Para quien no haya visto los cortos, o no se imagine ya la historia, aquí va una breve sinopsis, tan obvia y simplona como la película misma: un sencillo hombre llamado Longfellow Deeds (Adam Sandler) recibe una herencia de 40 billones de dólares y con su sencillez y honestidad demuestra que un hombre no es importante por su dinero, sino por su buen corazón. Pregunta: ¿cuánto cobró Sandler por participar en esta película?
Debo admitir otra cosa: mi interés estaba centrado en la participación de la actriz Winona Ryder, quien desde hace tiempo parece haber olvidado sus valientes actuaciones en inteligentes películas como "Heathers", "1969" o "Beetlejuice". En algún lugar de mi mente existía la posibilidad de que, milagrosamente, "Mr. Deeds" marcara su regreso a ese tipo de papeles, pero naturalmente no es así. Su interpretación de una cínica reportera conmovida por la sencillez y honestidad de Deeds, podría haber sido interpretado por cualquier otra actriz de moda, salida de algún sitcom televisivo o algún programa juvenil.
Dirección: Steven Brill.
USA, 2002.
Duración: 96 min.
Elenco: Adam Sandler (Mr. Deeds), Winona Ryder (Babe Bennett / Pam Dawson), John Turturro (Emilio López), Steve Buscemi (Crazy Eyes), Jared Harris (Mac MacGrath), Peter Gallagher (Chuck Cedar)
Guión: Tim Herlihy; basado en un cuento de Clarence Budington Kelland.
Producción: Sid Ganis y Jack Giarraputo.
Producción ejecutiva: Adam Sandler y Joseph M. Caracciolo.
Música: Teddy Castellucci.
Fotografía: Peter Lyons Collister.
Sitio oficial: www.sonypictures.com/movies/mrdeeds/