Siglo de mujeres

Las protagonistas de este libro tienen en común algo más que el hecho de haber nacido mujer. Fueron rebeldes, intensas y, a su manera, extremas.

Militantes políticas, pintoras, fotógrafas, músicas, filósofas, poetas, periodistas, todas lucharon contra el poder y las costumbres dominantes de su época y, aunque quizá alguna se sacudiría irritada el calificativo feminista, lo cierto es que lograron hacerse lugar y destacarse en un mundo masculino.

Lo que sigue es la sinopsis de los quince relatos que incluye la obra. Retratos biográficos que también pueden leerse como una crónica del siglo en que las mujeres dejaron de ser personajes de reparto, musas o inspiradoras para convertirse en sujetos con luz propia.

Inessa Armand (1874-1920)
Profesión: revolucionaria
Bolchevique, revolucionaria feminista y mano derecha de Lenin. Inessa Armand no conquistó siquiera una mención, en la historia oficial de la Revolución de Octubre. Mundana y políglota, no encarnaba el modelo de la heroína salida de la clase obrera. Pero quizá otro motivo explique la exclusión: Inessa fue amante de Lenin por lo que su figura podía ensombrecer la imagen del líder, que la ortodoxia soviética pretendió inmaculado

Séraphine de Senlis (1864-1942)
El sagrado corazón
La mitad de la vida de la pintora Séraphine de Senlis transcurrió fuera de la sociedad. Durante veinte años trabajó como sirvienta en régimen de clausura en un convento y murió en un hospital psiquiátrico tras diez años de internación. Dejó una obra sui generis que ha sido calificada de primitiva, ingenua o alienada y que cautivó a los surrealistas

Nora Astorga (1949-1989)
Diplomática y guerrillera
Abogada y guerrillera, después del triunfo de la Revolución Sandinista Nora Astorga estuvo al frente del juicio a los miembros de la Guardia Nacional de Somoza. Fue la primera y única mujer que representó a Nicaragua en la ONU. Hizo una brillante carrera política y diplomática y murió en Managua a los 38 años luego de una penosa lucha contra el cáncer

La sombra de Luz Arce (1948-)
Luz Arce es símbolo de traición para la izquierda chilena de la década del setenta. Secuestrada después del golpe de Estado que derrocó a Salvador Allende, se quebró y entregó a sus compañeros. Se integró a la DINA (Dirección Nacional de Inteligencia) como funcionaria con rango militar y terminó dando clases en la Escuela Nacional de Inteligencia. En 1980 renunció a su cargo y, diez años más tarde, tras una conversión religiosa, testimonió en la Comisión Verdad y Reconciliación, y denunció ante la justicia a sus torturadores.

Milena Jesenská (1896-1944)
El arte de permanecer de pie
Periodista y traductora, mujer de nota en la Praga de entreguerras, comunista luego disidente, militante de la Resistencia, Milena murió en el campo de concentración de Ravensbrück. Cuando el régimen comunista se instaló en Checoslovaquia, un cerrado silencio clausuró su memoria. Hubo que esperar a que Kafka dejara de ser un autor ignorado o prohibido en su país para que volviera, de la mano de Cartas a Milena, en musa del escritor.

La pasión de Margarete Buber-Neumann (1901-1989)
Prisionera de Satlin y de Hitler, Margarete Buber-Neumann sobrevivió a Siberia y a Ravensbrück. Durante el cautiverio maduró un compromiso: vivir para dar testimonio. El resultado de esa convicción que hizo de la escritura acto de memoria y arma de combate, fueron siete libros, decenas de artículos periodísticos y guiones para radio y televisión. Su obra es considerada como una de las miradas más agudas y humanas sobre el siglo de los campos de concentración.

Lee Miller (1907-1977)
El encanto salvaje
Mujer de belleza atronadora, Lee Miller lo vivió todo con intensidad. Fue modelo Vogue, musa del surrealismo, corresponsal de guerra -estuvo entre los primeros que, tras la liberación, fotografiaron los campos de Buchenwald y Dachau- y terminó sus días como excepcional gourmet.

Annemarie Schwarzenbach (1908-1942)
La vida errante
Durante mucho tiempo Annemarie Schwarzenbach no fue más que una mención frecuente en los diarios personales de Thomas Mann y su hijo Klaus. No se la tenía como escritora por derecho propio sino como ser extraño y de equívoca belleza. Un talento que la adicción a la morfina y la muerte prematura habían malogrado. Considerada hoy entre las grandes escritoras de viaje del siglo XX, también se la aprecia por sus trabajos de periodista y fotógrafa.

Gerda Taro (1910-1937)
Fotografiar la Historia
El destino reservó a Gerda Taro un final terrible que la arrancó de la vida a los 26 años y una muerte lenta y persistente que la esfumó en la bruma del olvido durante medio siglo. Su trabajo como fotógrafa y periodista quedó perdido tras el prestigio de la marca Robert Capa y cuando se la mencionó fue solo como dato importante pero fugaz en la vida del célebre fotógrafo de guerra. La ubicación e identificación de más de trescientas fotos suyas han permitido restablecer el lugar que, con talento y coraje, Gerda se ganó en la Historia de la fotografía de guerra.

Hannah Arendt (1906-1975)
La fuerza del pensamiento
Teórica y escritora; alemana y judía, la obra de Hannah Ardendt es un ejercicio de libertad, coraje e independencia intelectual. El concepto de banalidad del mal creado a partir de juicio al nazi Adolf Eichmann-, así como sus reflexiones sobre el origen del totalitarismo, el antisemitismo y el imperialismo han sido decisivos para comprender los horrores del siglo XX.

Nina Simone (1933-2003)
Negra es la música
Pianista, compositora y arreglista, Nina Simone grabó más de cincuenta discos en los que combatió la segregación, cantó al amor y a la soledad. Militante de la Revolución Negra, abandonó los Estados Unidos y renunció a su ciudadanía en protesta por el racismo que dominaba a su país. Comparada con Billie Holliday, ella se consideraba una María Callas.

Asja Lacis (1891-1979)
El teatro es un arma peligrosa
Comunista, actriz y directora de teatro, Asja Lacis fue protagonista destacada de la vida artística e intelectual de la izquierda alemana en la República de Weimar. Tras diez años de cautiverio en un gulag soviético, volvió a dedicarse al teatro y a difundir la obra de Bertolt Brecht.

Vida y muertes de Iara Iavelberg (1944-1971)
Sicóloga, militante, judía y feminista, Iara Iavelberg fue el gran amor del capitán Carlos Lamarca, leyenda de la guerrilla brasileña. Hizo suyo el compromiso de una generación revolucionaria y se distinguió de ella por la pasión con la que, aun en las difíciles condiciones de la vida clandestina, reivindicó la tolerancia y la libertad personal.

Marina Tsvetáieva (1891-1941)
La poesía como destino
Marina Tsvetáieva es una de las más vibrantes voces poéticas del siglo XX. En su patria, la Unión Soviética, fue silenciada y permaneció casi inédita hasta que en la década del sesenta comenzó a conocerse en ediciones clandestinas. El derrumbe del régimen soviétivo la arrancó del olvido y la lanzó al público. Admirada y leída con pasión, su obra y su vida se han convertido en objeto de culto. Las casas donde vivió son museos y hasta se conservan como reliquias la cuerda y el gancho con los que se colgó, acorralada por la persecución estalinista.

Pirí Lugones (1925-1978)
Nieta de poeta, hija de torturador
Nieta del poeta Leopoldo Lugones e hija del comisario del mismo nombre, inventor de la picana. Figura clave en la vida cultural y en la bohemia del Buenos Aires de los años sesenta y setenta, trabajó como editora, periodista, crítica literaria, traductora, cuentista y productora de televisión. Militante montonera, fue secuestrada en 1977 y permanece desaparecida.

Sobre la autora
Virginia Martínez

(Montevideo, 1959)Es profesora de Historia, realizadora y productora de cine. Publicó El círculo Las vidas de Henry Engler (junto a José Pedro Charlo y Aldo Garay, Banda Oriental, 2009), Tiempos de dictadura 1973-1985 Hechos, voces, documentos. La represión y la resistencia día a día (Banda Oriental, 2005) y Los fusilados de abril ¿quién mató a los comunistas de la 20? (Banda Oriental, 2005).Dirigió los documentales Las manos en la tierra, Memorias de mujeres, Ácratas y Por esos ojos por los que recibió premios nacionales e internacionales.

Fue directora de producción de los documentales Ella, la huella de Mercedes Pinto, El círculo, La sociedad de la nieve, El plan Cóndor, Palabras verdaderas, Los huérfanos del Cóndor y de la ficción La historia casi verdadera de Pepita la pistolera.

Trabajó como asesora de programación de Televisión Nacional de Uruguay (2007), fue coordinadora de producción de Tveo (2000-2001), codirectora general de tevé Ciudad (1996-2000) y directora de producción del Centro de Medios Audiovisuales (CEMA) entre 1989 y 1996.

Dicta el curso Taller de Comunicación en la Licenciatura de Comunicación y Diseño de la Universidad ORT. Colabora habitualmente con El País Cultural.

Siglo de Mujeres
Virginia Martínez
Ediciones de la Banda Oriental
231 páginas
$ 280