Contenido creado por Ignacio Alcuri
Política

El caso de las disculpas

Mujica pidió disculpas a Cristina

"Debo pedir sentidas disculpas a quienes pude lastimar en estos días por mis dichos, y sobre todo a los que son, como nosotros, integrantes del sueño de la patria grande y federal", dijo José Mujica en su audición radial. Explicó que su lenguaje era "para los íntimos y no puede encajar ni encajará jamás con el discurso público".

11.04.2013 10:19

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2013-04-11T10:19:00-03:00
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Montevideo Portal

Por primera vez, el presidente José Mujica pidió disculpas por sus dichos sobre Cristina Fernández y Néstor Kirchner, pronunciados en una conversación con el intendente de Florida Carlos Enciso sin percatarse de que los micrófonos lo estaban captando.

La frase "esta vieja es peor que el tuerto", entre otras, tuvo repercusiones mundiales, y hasta ahora Mujica había eludido referirse directamente a ella.

Como si fuera un adelanto de la carta de justificación que escribirá a Cristina Fernández, Mujica explicó hoy en su audición radial de M24 el porqué de su lenguaje "reo" y solicitó disculpas.

"Hace medio siglo fui clandestino, cuando quería cambiar el mundo. En aquella época uno de los problemas era ir preso y torturado", dijo, explicando que su cerebro quedó programado, por ejemplo, "para no recordar números telefónicos". "No recuerdo ni el mío ni el de mi compañera. Quedé bloqueado por efecto der aquella disciplina de enorme compromiso", aseguró.

"¿Por qué decimos esto? Nos quedaron de aquellos años muchas cosas. El trillo, ese caminar de kilómetros en una pieza. La vida interior, darle vuelta a las cosas, por efecto de aquellos años y duras peripecias de andar en la cárcel de Puna Carretas (conozco más de 80 calabozos)", dijo. A eso hay que sumarle "el origen, vengo de los barrios pobres, donde mis amigos de gurises andaban de zapatillas y nuestras verederas eran de tierra".

"No podemos evitar que nuestro hablar corriente, íntimo, entre pocos, nuestro lenguaje por momentos sea reo, áspero", agregó. "Por muchos años tuvimos que cultivar un decir, un hablar para cuarteles. Había que comunicarse adoptando las formas para sobrevivir. Ese lenguaje está a leguas del discurso público, tiene que ver con las relaciones íntimas, inevitablemente arrastra en sus modismos nuestra propia historieta", admitió el presidente.

"Para que resulte más nítido, más claro, hubo que hablar por años con soldados y presos comunes", señaló. "Reinan entre nosotros los sobrenombres, como rengo, tuerto, mono, etcétera, y también la exageración como contracara. Es un decir entre pocos, casi susurrando", opinó Mujica, refiriéndose al "lenguaje de resistencia, un lenguaje herramienta, que juega para los íntimos y no puede encajar ni encajará jamás con el discurso público que cultivan naturalmente otros".

"Todo esto que estoy relatando lo pueden entender pocos, los que vivieron algunas de estas peripecias. Debo pedir sentidas disculpas a quienes pude lastimar en estos días por mis dichos y sobre todo los que son como nosotros integrantes del sueño de patria grande y federal", se excusó.

Críticas

El presidente, sin embargo, no olvidó criticar a la oposición y a la prensa por aprovechar sus palabras, pronunciadas en una conversación privada.

"Fuimos acusados de genuflexos, pero nadie nos ha pedido disculpas", opinó, en referencia a la oposición que criticó ahora sus palabras pero que meses atrás le pedía más firmeza con Argentina. "Yo sé naturalmente que al parecer estas son las leyes del juego. Hemos tratado de hacer todo lo posible por sostener una relación. Hace años que existe una campaña cuasi permanente, que insiste que Argentina se cae, que va camino a una república paupérrima", dijo, agregando que se le pide a su gobierno que se "insubordine" ante la situación. "Mentira sobre mentira. La Argentina ha crecido enormemente, nunca tuvo gobiernos que hicieran tanto por los postergados desde hace mucho. Tienen problemas, pero ¿quién no los tiene?", opinó.

"Quienes conozcan un poco de historia, sabrán que cuando a Argentina les va bien nosotros nos beneficiamos y cuando anda mal nosotros padecemos. ¿Alguien puede ignorar que cuando la relación es mala, terminan ganando los que están lejos?", dijo, además de señalar que "puede haber el deseo de que el gobierno se perjudique en materia económica y con ello crezca la oposición, pero debemos recordar la historia".

El mandatario se despachó también contra la prensa, que a su juicio desató en la previa a las últimas elecciones una "campaña que nos indicaba poco más que como propietarios del arsenal de Feldman". "Gran publicidad. Después las cosas llevaron su curso y su desenlace patético. Nada teníamos que ver. Sin embargo, nadie en aquel entonces nos pidió disculpas. Son cosas que uno sencillamente debe decir. Como decíamos en los barrios: calavera no chilla", concluyó.

 

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