Repercusiones sobre la esencialidad

Tras llegar a una acumulación de 6 millones de kilos de basura, la intendenta de Montevideo, Ana Olivera, pidió al Ministerio de Trabajo que decrete la esencialidad de la recolección de basura. Esta decisión era reclamada desde hace ya varias semanas por las figuras más diversas de la oposición.

Después de que se conociera este anuncio, el líder del Partido Independiente, Pablo Mieres, opinó que esta decisión "era imprescindible" y dijo que la jefa comunal "demoró demasiado" en tomarla, pero agregó que "más vale tarde que nunca".

Si bien Mieres coincidió con la decisión, discrepó con los detalles que dio Olivera sobre el dinero que se destina a la limpieza de la ciudad. "Adeom está llevando adelante un conflicto salvaje y la postura de la intendenta no fue firme". Por el contrario, "fue muy débil, sumisa y subordinada a los trabajadores municipales", opinó Mieres para quien la intendenta "está pagando el hecho de que ella misma defiende la lógica sindical".

Por su parte, la diputada nacionalista Analía Piñeyrúa expresó "la satisfacción porque haya dado un primer paso para solucionar un problema que puso en riesgo la salud de los montevideanos".

Este miércoles la Comisión Departamental del Partido Nacional reclamó a la intendenta que se declare la esencialidad y por eso el partido se muestra "muy satisfecho" aunque mantiene "la preocupación por el no ejercicio de la autoridad" por parte de la jerarca.

"Sabemos que implementar una declaración de esencialidad no es fácil porque va a tener que requerir el servicio de otras empresas y de servicios del Estado. Por eso le ofrecimos nuestra colaboración en la implementación de esta medida, pues entendemos que por encima de todo están los intereses de los montevideanos".

Piñeyrúa coincidió con Mieres en que ésta es "una decisión tardía" y agregó que "este problema la intendencia lo tiene aún cuando no hay conflicto con el sindicato".

Por su parte el diputado colorado Fitzgerald Cantero opinó que "la situación no daba para más" y dijo que la decisión de decretar la esencialidad "tendría que haberse tomado mucho antes".

No funcionó la negociación

En tanto, la ex intendenta, Hyara Rodríguez, se mostró "totalmente de acuerdo con la decisión" a la que calificó de "dolorosa porque indica que con la negociación no se logró el objetivo".

"No hemos logrado tener en Montevideo un sindicato que piense que ser funcionario público es estar al servicio de la población. Haber llegado a este extremo de condicionar el derecho de huelga es doloroso pero apoyo absolutamente este paso", apuntó Rodríguez.

Para la ex jefa comunal la decisión "se tomó en el momento justo y se esperó lo justo. Todos esperábamos que el sindicato se autorregulara y no llegara a provocar ese riesgo para la salud".