Desde la Cámara de Telecomunicaciones del Uruguay nos dirigimos a Ud. con el fin de conmemorar el aniversario de la firma del primer Convenio Telegráfico Internacional y la creación de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, sin duda verdaderos propulsores de la próspera realidad que hoy cursan las telecomunicaciones en el mundo entero.
Cada vez es mayor la demanda de las tecnologías de la información y comunicación (TIC´s) para satisfacer los Objetivos de Desarrollo en sus diferentes expresiones. Estamos transitando un cambio de paradigmas a nivel mundial; vivimos en un escenario que toma a la Telefonía móvil y la Banda Ancha como herramientas fundamentales para canalizar el desarrollo económico y social de un país. Desde la CEPAL se concluye que el desarrollo de las telecomunicaciones trae aparejado múltiples impactos positivos en el crecimiento económico e inclusión social como ser: aumento en la tasa de productividad, mayor innovación en procesos productivos y organizativos, creación de empleo, mayor acceso a información, acceso a servicios públicos en línea, mayor participación ciudadana y mejor atención de catástrofes.
Felizmente el trabajo diario que desarrollamos quienes estamos en esta industria en nuestro país, producto de la implantación de la libre competencia, hacen que los relevamientos arrojen algunas cifras alentadoras como por ejemplo tener de los índices de penetración de la telefonía móvil más alto de la región. Esto la transforma en una herramienta de equidad, que no discrimina sino todo lo contrario, que une en igualdad de condiciones a toda la población.
Resta mucho por hacer. Consideramos fundamental la generación de instancias que permitan comunicación e intercambio de ideas; espacios abiertos y participativos en donde todos los actores involucrados podamos reflexionar en conjunto. Por otra parte, se necesita también contar con reglas claras y que den certeza en el momento que las empresas deciden invertir en el país. A su vez contar con autoridades imparciales de tal forma de generar un escenario de real equidad entre los operadores, que actúen con celeridad, lo cual redundará en beneficio de la sociedad toda. No es posible la universalización, ni la masificación de los servicios sin un escenario propicio para el despliegue de infraestructuras; igualdad y competencia entre los operadores son imprescindibles para un real desarrollo de las telecomunicaciones.
Ing. José Pedro Derrégibus
Presidente de la Cámara de Telecomunicaciones del Uruguay
