La mujer a la que la Justicia impidió abortar “irá contra la jueza”

En una entrevista concedida a la periodista argentina Gisele Sousa Días y publicada por Infobae, la mujer a la que la Justicia impidió abortar dio su versión sobre los hechos ocurridos en los últimos días, explicó que el hombre que la demandó no era su pareja y no que su relación con él no fue "nada serio", y adelantó que "irá contra la jueza".

La mujer, que tiene 24 años y trabaja en sanatorio de Mercedes, contó que tiene un hijo de 5 años, que nació con una malformación y que pasó por muchas operaciones.

"Estuve ocho meses internada con él, durmiendo en los pasillos. Durante ese tiempo no sabía si vivía o se moría, fue una tortura psicológica fatal", dijo, y explicó que, luego de separarse del padre del niño, no quería entablar una relación seria con otro hombre.

Conoció a la persona que interpuso la demanda en su contra, a quien definió como alguien "sexo, droga y rock and roll", y comenzaron una relación que no era "nada serio".

"Es un tipo que gana 12.000 pesos al mes, y cuando lo conocí, la madre se pudrió, lo echó de la casa y se fue a vivir con cinco amigos. Es un tipo de 30 años, así, hippie y volátil. No paga el cable, no tiene servicios básicos, no tiene una cama y, como es profesor de educación física, comía en las escuelas en las que trabajaba. Se vendió como un padre responsable pero jamás me dio ni 100 pesos para hacerme una ecografía. ¿Qué padre responsable si cree que tiene otros hijos por ahí y jamás fue capaz de hacerse un ADN?", opinó.

Además, apuntó que, como ella padece una lesión en el útero, debe tomar pastillas anticonceptivas muy fuertes que le cayeron mal, y que, mientras cambiaba de pastillas por recomendación médica, quedó embarazada.

En esa oportunidad le dijo al hombre que estaba grávida, y este le respondió que, tomara la decisión que tomara, contaría con su apoyo. Ella no sabía si seguir adelante con el embarazo porque, más allá de las dificultades sanitarias que le podría ocasionar, no contaría tampoco con los ingresos necesarios para afrontar su crianza. "Cuando tomé la decisión pensé: 'Bueno, lo hago y tá', encima él ya estaba saliendo con otra chica y decía que estaba re enamorado. Pero no", dijo.

Fue así que se presentó en la mutualista para que le practicaran un aborto, y cumplió con los pasos que establece la ley. Sin embargo, dos días antes de la última entrevista con el ginecólogo, cuando se le daría la pastilla para interrumpir el embarazo, se le comunicó que no podría hacerlo, por decisión judicial.

"Ese mismo día empecé con contracciones y sangrado, me dolía hasta respirar. El médico me dijo que había una amenaza grande de tener un aborto natural. Fui a la emergencia todos los días y todos los días me dijeron 'es el estrés que estás pasando', explicó la mujer.

Tras sufrir un aborto espontáneo este miércoles, la mujer dijo que "sintió el alivio de que fue de forma natural", aunque sabe que "hora está la sospecha de si fue o no fue así". "Tuve que documentar todo, ponerme guantes y poner el feto en un frasco de urocultivo para que le hagan los estudios en anatomía patológica, si no me metían presa. Seguro ahora este joven me va a demandar pero en 20 días van a estar los resultados de la anatomía patológica. Pero vamos a ver, yo no se si ese feto estaba vivo o no. ¿Y si yo me agarraba una bruta infección? ¿Quién se iba a hacer cargo por obligarme a tenerlo?", argumentó.

Sobre la jueza que hizo lugar al pedido de su ex pareja, la mujer dijo sentir una "indignación total", aunque "no le asombra" su actitud, porque la magistrada "se llama Pura Concepción y, como es devota del Padre Pío, le puso Pío a su hijo".

Agregó que está "indignada" porque Pura Book no cumplió con la ley vigente, y adelantó que irá "con todo contra la jueza".

"Una decisión así te puede destrozar. Estas semanas fueron terribles, todo el mundo opinando sobre mi cuerpo. Una jueza me obligaba a tenerlo y encima a cargar con la culpa de que luego le dijeran a ese bebé: 'vos naciste porque una jueza lo ordenó, no porque tu madre te quisiera'. En estas semanas escuché comentarios de la gente del tipo 'bueno, si le gustó coger ahora que se haga cargo'. Yo no pensé en hacer ninguna locura porque tengo este carácter y esta entereza. Pero yo trabajo en Salud y vi a muchas mujeres abortar hasta con perchas, por eso se votó la ley, porque las mujeres se morían. Esta jueza le puso un abogado al feto, cuando en Uruguay está establecido que un ser humano es sujeto de derecho a partir del nacimiento, no de la vida intrauterina. Ella no puede volver atrás con una ley que fue debatida durante años. Por eso le voy a hacer juicio, no quiero que las chiquilinas vuelvan a hacerse esos abortos clandestinos y vuelvan a morirse desangradas, como se morían antes", reflexionó.