El ministro de Salud Jorge Basso concurrirá hoy a comisión para explicar corralito permanente

El ministro de Salud Jorge Basso concurrirá hoy a la Comisión de Salud del Senado para dar explicaciones sobre la suspensión de la apertura del corralito mutual, que permitía cambiarse de prestador de salud durante febrero de cada año.

En conversación con Montevideo Portal, el senador del Partido Nacional Javier García dijo que se trata de una decisión en el sentido inverso al que el sistema necesita y señaló que si los usuarios no pueden cambiarse los prestadores no tendrán motivos para mejorar su servicio.

''El camino que corresponde es apostar a defender los derechos de los usuarios, la calidad del servicio y la libertad de elección. El gobierno no solo no elimina el corralito, sino que lo profundiza en una violación de los derechos de los usuarios'', afirmó García.

Cuando se aprobó la ley que creó el sistema integrado de salud se dispuso la creación de un corralito mutual que impedían a los usuarios cambiarse de prestador. Ese corralito se abría cada febrero para que quienes quisieran pudieran cambiarse, siempre que tuvieran al menos tres años de antigüedad.

De esa forma se buscaba que no se diera una corrida que generara inestabilidad en el sistema y a su vez tener un mayor control sobre los cambios. De todas formas, fuera del período de cambio existía la posibilidad de presentarse ante la Junta Nacional de Salud y solicitar el cambio argumentando razones de pérdida de la confianza o asuntos específicos vinculados al tratamiento de determinadas enfermedades o situaciones concretas.

Para mejorar la calidad de la decisión del prestador para elegir, el Ministerio desarrolló un servicio de información disponible en la web A tu Servicio, que daba cuenta de un número importante de indicadores sobre cada prestador.

Ese proceso quedó detenido cuando en enero pasado el ministro Basso anunció que ya no se podría cambiar de prestador, argumentando que no se pudo combatir el delito de intermediación lucrativa, por la que hubo 60 procesados en 2017.

El nuevo sistema, que regirá desde este año, obligará a los usuarios que deseen cambiar de prestador a enviar una carta a la Junta Nacional de Salud explicitando los motivos por los que quieren hacer el cambio. Únicamente podrán hacerlo en caso de disconformidad con el servicio, por cambio de domicilio o por los costos, en caso de que quiera pasar a ASSE. Ese trámite podrá hacerse durante todo el año y no solo en febrero, como sucedía hasta ahora.

Además los usuarios que logren cambiarse deberán firmar una declaración jurada en la que expresa que "en ningún momento ha sido compensado económicamente o de otra manera por el cambio de prestador".

En 2017 se cambió el 3.4% de los habilitados para cambiarse, cifra que venía disminuyendo en los últimos años.