Galeano y su relación con la muerte

"Nacerán y volverán a morir, y otra vez volverán a morir y otra vez nacerán. Y nunca dejarán de nacer, porque la muerte es mentira". 
Eduardo Galeano/Memoria del fuego

En el libro "Memoria del fuego", Eduardo Galeano recuerda una leyenda sobre la creación del mundo extraída de la mitología makiritare. La leyenda se titula "La muerte es mentira", y en ella se narra cómo la mujer y el hombre soñaban que Dios los estaba soñando.

La mujer y el hombre soñaban que en el sueño de Dios aparecía un gran huevo brillante. Dentro del huevo, ellos cantaban y bailaban porque estaban locos de ganas de nacer. Dios, en su sueño, los creaba y, sin dejar de cantar, les decía: "Rompe este huevo y nace la mujer y el hombre. Y juntos vivirán y morirán. Pero nacerán nuevamente. Nacerán y volverán a morir, y otra vez volverán a morir y otra vez nacerán. Y nunca dejarán de nacer, porque la muerte es mentira", decía el relato.

Galeano coqueteó con la muerte varias veces, tanto en la vida como en la literatura. Tuvo al respecto una visión lúcida y valiente, que mantuvo incluso en las etapas avanzadas del cáncer que lo terminó matando.

En una entrevista concedida el año pasado, La Nación contaba que la relación de Galeano con la muerte comenzó día en que, siendo un adolescente de 19 años, emergió de un coma y descubrió que estaba vivo en una cama del hospital Maciel, adonde había llegado tras ingerir barbitúricos. Siguió muchos años después, cuando logró sobrevivir a duras penas el paludismo que había contraído en Venezuela.

"He renacido muchas veces", dijo a La Nación. "En realidad uno nace y muere muchas veces en la vida. Lo que pasa es que uno está reducido a ver la muerte como una especie de pasaje, una empresa de pompas fúnebres, que te saluda el chofer y te dice hasta luego. Y no es así, en realidad uno se muere muchas veces, y renace otras tantas. Eso es lo que tiene de bueno el arte de vivir", dijo el escritor.

En una entrevista con la revista Ñ, el periodista le preguntaba: "¿Qué es la muerte para usted?".

"Depende de la hora del día. A veces me angustia. A veces le tengo miedo. A veces me resulta indiferente, y otras veces, las más frecuentes, creo que la muerte y el nacimiento son hermanos. Que la muerte ocurre para que el nacimiento sea posible. Y que hay nacimientos para confirmar que la muerte nunca mata del todo", respondió.

"¿Le temió a la muerte en el momento de su enfermedad?", le preguntan. "No. Ya habíamos tenido otros encuentros. Estamos acostumbrados, somos íntimos", replicó Galeano.

Entrevistado por Público de España, se refirió también a su danza cercana con la muerte. "Creo que el miedo de vivir es peor que el miedo de morir. Y me parece que el asunto, en este mundo y en este tiempo, es ese: el miedo de recordar, el miedo de ser, el miedo de cambiar. O sea: el miedo de vivir".

En su texto "Hablan las paredes" reflexionó sobre la muerte en diferentes frases.

"La muerte es un mal hereditario.
Hablaban tan bien de mí, que pensé que me había muerto.
La muerte siempre gana, pero te da una vida de ventaja.
No te preocupes tanto por la vida, porque no saldrás vivo de ella.
Todos los dioses fueron inmortales.
Lo único seguro es que quién sabe".

En una entrevista con Democracy Now en 2013, Galeano se había referido también a su enfermedad, tras batallar con el cáncer dos veces (la primera en 2007)

"Estoy cruzando un periodo difícil, y me doy cuenta de que descubrí nuevos remedios que tienen efectos secundarios muy malos pero que me están curando. El doctor me dijo: ‘tenés que aceptar esos efectos secundarios para seguir viviendo, de lo contrario podrías estar muerto'. ‘Ah, no', le dije al doctor, ‘la muerte es aburrida'", contó en la entrevista el escritor.