Contenido creado por Laura Meléndez
Ciencia

A brillar mi amor

Descubren nuevos usos para los diamantes

Un proyecto europeo trabaja en la transformación de diamantes en sensores magnéticos diminutos que podrían utilizarse, entre otras cosas, para desarrollar discos de almacenamiento pequeños y de alta densidad.

02.02.2015 13:22

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2015-02-02T13:22:00-03:00
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Además de ser utilizados en joyería, los diamantes están siendo explorados como fuente para nuevos materiales que serán de utilidad en diversas industrias.

El proyecto Diadems (DIAmond Devices Enabled Metrology and Sensing) se dedica a sustituir un solo átomo de un cristal de diamante por otro de nitrógeno, proceso que se conoce como dopaje). Atrapando el nitrógeno en el cristal, los investigadores pueden obtener una estructura de escala atómica con propiedades magnéticas intrínsecas que obedecen a la mecánica cuántica, según informa Tendencias21.

"Esto significa que, en última instancia, podemos crear sensores diminutos que pueden detectar señales magnéticas débiles. Estas señales magnéticas nos permitirían, por ejemplo, monitorizar la actividad eléctrica de neuronas sobre un portaobjetos de diamante y ver cómo funcionan juntas", explica Thierry Debuisschert, coordinador de Diadems, y radicado en Thales (Francia).

"En el futuro, podríamos incluso ver si una neurona responde a una sustancia química utilizada en un tratamiento", añade, en la información de Cordis. Diadems podría marcar la diferencia en las disciplinas donde los campos magnéticos desempeñen algún papel.

Otras aplicaciones

Con esta capacidad tan innovadora de ver cómo reaccionan las moléculas mediante la lectura de variaciones en el espín de sus electrones, los investigadores podrán analizar lo que sucede exactamente en reacciones químicas a escala molecular y atómica.

Esto también podría ser útil en informática, ya que los sensores podrían usarse para desarrollar pequeños discos de almacenamiento y de alta densidad que poseyeran mucha más capacidad y fiabilidad.

"La capacidad de los discos de almacenamiento de datos es cada vez mayor, lo cual reduce enormemente el tamaño de los dominios magnéticos que se utilizan para almacenar la información. Trabajando en el nivel atómico y molecular, podríamos ser capaces de controlar estos dispositivos de almacenamiento a la escala necesaria para conseguir un almacenamiento de alta densidad", señala Debuisschert.

El proyecto, de cuatro años de duración, se inició en setiembre de 2013. Cuenta con un apoyo de la Unión Europea valorado en 6 millones de euros dentro del programa Tecnologías futuras y emergentes.