Habrá que jugarle al cuatro a la grande. Alemania, como hace cuatro años, eliminó a Argentina en cuartos y esta vez le metió cuatro goles. Y pudieron ser más.
El equipo dirigido por Joachim Low no sólo habló en lo previo al partido, sino que estudió a su rival como nadie hasta el momento.
Los germanos salieron a presionar la salida albiceleste y rápidamente tuvieron réditos. Podolski encaró la marca de Otamendi por izquierda, recibió una falta merecedora de una amonestación que el árbitro no determinó, y de ese tiro libre a los 2 minutos llegó la apertura del score.
Centro cerrado de Schweinsteiger peinado por Müeller, mirada cómplice de la defensa argentina y un quede total del arquero Sergio Romero. Sin despeinarse, los teutones ganaban en el amanecer del encuentro, pero lejos de conformarse con eso, buscaron el knock out de inmediato.
Durante 15 minutos la defensa del equipo de Maradona hizo agua por todos lados. Los volantes alemanes movieron la bola rápidamente, llegaron por las dos bandas y jugaban al monito con el pobre Mascherano. El capitán corrió solitariamente en la búsqueda de un esférico que parecía propiedad de los europeos.
La respuesta albiceleste ante el dominio de su rival fue el golpe, y para ello contó con la complicidad del uzbeko Irmatov, de pésima labor. Apenas mostró una amonestación para cada lado, cuando bien pudo haber sacado cuatro o cinco amarillas más.
Un error de la retaguardia le posibilitó a Müller habilitar a Klose a los 23’, pero el goleador desaprovechó una oportunidad inmejorable para aumentar la ventaja elevando su disparo.
Argentina recién se aproximó al arco rival pasada la media hora de juego, son remates débiles de Di María e Higuaín. ¿Messi? Figura nominal.
A los 36’ fue bien invalidado un tanto de Higuaín, ya que quien lo habilitó, Tévez, había recibido de Heinze en una posición adelantada tan clara como la del partido ante México.
La sacó barata el equipo de Maradona en un primer tiempo en donde hizo agua por momentos y falló la contención en el mediocampo por tener un solo futbolista de marca.
La falta de autocrítica y de lectura de juego por parte del entrenador argentino, hizo que el trámite no cambiara y aparecieran espacios para los teutones, que aprovecharon las facilidades y terminaron bailando a ritmo de cuarteto.
Las variantes no hacían reaccionar a un equipo sin respuestas anímicas ni futbolísticas, y a los 22' se terminó el encuentro. Una combinación entre Khedira y Müller por izquierda dejó a Podolski de cara al gol, pero el zurdo dejó más solo aún a Klose, quien tuvo tiempo en el área chica para pararla y meterla.
Los minutos restantes, sirvieron para que un triunfo claro se convierta en goleada histórica. Schweinsteiger armó una jugada bárbara ante la pasividad del fondo argentino, y Friedrich terminó la maniobra con un toque corto que terminaba de sentenciar el juego, por si quedaba alguna duda.
Klose hizo el cuarto, y pudo haber quinto, sexto... pero hubo piedad y falta de puntería, por lo que el bochorno albiceleste con Messi a la cabeza quedó en eso.
Alemania anota cuatro goles en un partido por segunda vez consecutiva y tercera en el torneo (Australia, Inglaterra y Argentina). Klose con 14 tantos quedó a un gol del récord histórico de Ronaldo, y le quedan dos juegos para lograrlo. A este ritmo, le alcanza y sobra.
Montevideo Portal