Los históricos ausentes

El hispano argentino e ídolo en el Real Madrid, Alfredo Di Stefano, nunca jugó un Mundial y en 1962 se lesionó a pocos días de comenzar la cita en Chile.

En Estados Unidos 1994 el gran "no estoy" lo dio el holandés Marco Van Basten. El delantero sufrió una lesión en la rodilla que lo obligó a no asistir.

Para el Mundial de 2002 en Corea y Japón fueron dos los importantes futbolistas que no estuvieron. Es el caso del ídolo italiano Roberto Baggio que a seis meses del comienzo del certamen se rompió los ligamentos de la rodilla derecha. El otro que no dijo presente en 2002 fue el francés Robert Pires.

Inglaterra fue la gran afectada por las lesiones en el primer Mundial que se diputaba en tierras africanas. David Beckham se rompió el talón de Aquiles, Owen tuvo un golpe en el tendón y Ferdinand a falta de pocos días padeció una ruptura de rodilla.

También faltó en 2010, Michael Ballack. El alemán tuvo semanas antes un rompimiento en los ligamentos internos del tobillo izquierdo.

Para el campeonato de Brasil son muchos los lesionados. Por ejemplo: el colombiano Radamel Falcao García, el inglés Theo Walcott y el alemán Ilkay Gündogan entre otros.