Contenido creado por Cecilia Franco
Esteban García Lorenzo

Escribe Esteban García Lorenzo

Opinión | Nunca trabajaremos juntos

El trabajo en equipo puede ser complicado, o directamente un fracaso, si no contemplamos algunos detalles para elegir integrantes.

10.05.2021 10:47

Lectura: 2'

2021-05-10T10:47:00-03:00
Compartir en

Todo emprendimiento conlleva, más temprano que tarde, la necesidad de trabajar en equipo.

Esto aplica tanto en pequeños proyectos independientes como en grandes empresas. Y si bien estas últimas cuentan con años de experiencia organizacional, hay algunas dificultades que se repiten casi como un karma.

Lo primero que deberíamos entender, y aceptar, es que los equipos se deben a los objetivos. Hace poco leí que "existe la persona indicada para cada tarea, solo hay que aprender a identificarla." Deformé un poco la frase, quizás no debería llevar comillas, pero básicamente ese era el mensaje.

La mayoría de los proyectos están basados en amistad y no en objetivos. Lo vemos todo el tiempo en emprendimientos familiares, parejas, amigos, y otras afinidades como la cercanía geográfica. Al priorizar esos vínculos, muchas veces se deja de lado la importancia de contar con las aptitudes para llevar a cabo exitosamente el proyecto.

Eventualmente, los malos resultados o la incapacidad de resolver algunos temas hará que el vínculo se desgaste. Por eso conviene tener una actitud fría y calculadora. Es tan paradójico como cierto, y en algún punto tiene relación con aquel consejo de "cuentas claras, amistades duraderas".

Peor aún, el fracaso puede destruir relaciones, y sería imposible revivirlas con un happy hour o un meme inspirador. Un buen gesto profesional es hacer una lista de todas nuestras aptitudes y competencias.

En una columna incluyamos todo lo que nos gusta, sabemos, y queremos hacer. En otra, todo lo que no sabemos y lo que no queremos hacer. Quedémonos con la segunda columna. Ahí tenemos los requisitos para elegir a quienes integrarán a nuestro equipo.

Esto sucede habitualmente (sin pandemia) en las canchas de fútbol 5. Nadie quiere atajar, todos quieren tener un golero en su cuadro, aunque sea un completo desconocido.

Los buenos resultados van a impregnar de energía positiva a todo el equipo. Y es muy probable que eso genere una buena relación, que eventualmente derivará en amistad.

Y si no llega a tanto, siempre estarán nuestras amistades esperando vernos después del trabajo.