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Científico uruguayo es el primer latinoamericano premiado por Fundación Mark Zuckerberg

El investigador del Institut Pasteur y la UdelaR, Leonel Malacrida, contó a Montevideo Portal en qué consiste la propuesta que presentó y sus sensaciones tras recibir el premio.

02.12.2020 15:24

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2020-12-02T15:24:00-03:00
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Por primera vez desde su creación, el programa CZI Imaging Scientists de la Iniciativa Chan Zuckerberg -la organización benéfica creada por Mark Zuckerberg y su esposa Priscilla Chan- otorgó uno de sus premios a un científico latinoamericano, el uruguayo Leonel Malacrida.

Investigador del Institut Pasteur de Montevideo y profesor de la Universidad de la República en el Hospital de Clínicas, Malacrida recibió un fondo de 370.000 dólares por cinco años para la creación en el país de una Unidad de Bioimagenología Avanzada (UBA) que buscará poner a Uruguay a la vanguardia de las tecnologías de microscopía y biofotónica que se usan para hacer investigación en diferentes campos científicos.

La propuesta que Malacrida presentó al concurso fue la creación de la UBA, que es un esfuerzo compartido entre el Instituto Pasteur de Montevideo y la Universidad de la República, con el objetivo de crear un laboratorio nacional que desarrolle y de acceso a instrumentos imagenológicos de última generación para todos los investigadores del país.

En diálogo con Montevideo Portal, Malacrida explicó en qué consiste la propuesta que presentó y las sensaciones al haber recibido este premio.

"Es la primera vez que financian a un latinoamericano, me siento muy honrado y orgulloso de representar al Uruguay con dos instituciones que se juntaron para hacer esta propuesta, como la UdelaR y el Institut Pasteur", dijo el científico.

"La obtención de imágenes de moléculas, células y tejidos es fundamental para la investigación biomédica y la práctica clínica, lo que permite a los científicos comprender e identificar enfermedades. Sin embargo, el progreso en el campo de las imágenes depende del desarrollo de instrumentos, métodos de microscopía avanzados y software, y eso es lo que busca impulsar el programa CZI Imaging Scientists a través de un llamado concursable para investigadores de todo el mundo", agregó.

La UBA -que se instalará próximamente en el IP Montevideo- funcionará como una unidad mixta entre el instituto y el Departamento de Fisiopatología del Hospital de Clínicas.

El científico sostuvo que "entre sus cometidos se destaca la fabricación de poderosos instrumentos y métodos de microscopia y bioimagenología (incluidos enfoques de óptica adaptativa y fuentes láser multifotónicas avanzadas) para estudiar las células en el interior de los tejidos biológicos".

Además de obtener imágenes con alta resolución espacial y temporal, la instrumentación de la UBA proporcionará información espectroscópica (derivada del estudio de imágenes con resolución de tiempo o espectral) de regiones específicas de células.

Asimismo, la UBA prevé desarrollar una combinación de tecnología de vanguardia y nuevos enfoques de inteligencia artificial para el análisis e interpretación de volúmenes y complejidad de datos cada vez más importante.

"La financiación es focalizada en potenciar el desarrollo y apostar a la persona que va a desarrollar el trabajo", sostuvo Malacrida.

"La propuesta se basaba en construir nuevos microscopios que permitan hacer algún tipo de medidas en particular relacionadas con imagenología en vivo, en animales, embriones, entre otras cosas. Que podamos acceder a información que está dentro de la célula, pero es muy difícil de obtener con técnicas convencionales", aseguró.

Además, el científico sostuvo que esta oportunidad "es un buen mensaje para los investigadores de salir al mundo".

"Los científicos siempre nos estamos midiendo con la comunidad, incluso si no somos electos para un concurso. Todo el tiempo enviamos nuestros papers a nivel internacional", comentó.

"Este tipo de iniciativas de laboratorios o centros calificados en tecnología es algo muy común en el mundo. Es el camino que han seguido los países en el mundo para darle un contexto a la tecnología y que pueda ser trasladada a una mayor cantidad de gente para sacar más beneficios", señaló Malacrida.

"Estas cosas han empezado a suceder en Uruguay y deberían ser importantes para aprender del mundo y tratar de empujar hacia ese lugar", concluyó.