Cerro se quedó con una victoria trabajada, difícil, necesaria y muy festejada, para no darle respiro al líder Peñarol y llegar al próximo sábado con aspiraciones de quitarle la punta. Tras jugar muy mal durante 45 minutos, el equipo de Ricardo Ortiz remontó en el complemento y se llevó tres puntos de oro.
El partido era malo, desprolijo y con un cuidado excesivo de lo táctico. En ese tipo de encuentros, las jugadas de pelota quieta tienen un valor apenas inferior al de un penal o un tiro libre al borde del área.
Defensor Sporting tuvo la suya en la primera mitad, no la desperdició, y así abrió el trámite en el único momento de supremacía de uno de los dos equipos durante el primer tiempo. A los 26’ Fleurquin exigió a Rolero a distancia y forzó un córner, y de la ejecución de ese tiro de esquina por parte de Brahian Aleman llegó el cabezazo goleador de Ramón Arias.
Los violetas pasaron a tener el partido controlado, pero no dominado, ante un conjunto de Cerro que durante 45 minutos no dio la sensación de estar jugando por las primeras posiciones del Apertura. Sin proyección por las bandas y extrañando el fútbol que le suele aportar Omar Pérez, chocó contra una defensa bien parada y equivocó procedimientos.
Los dirigidos por Ricardo Ortiz se repitieron en envíos aéreos y frontales, y ahí se lucieron Arias y Moiraghi. Del otro lado, Federico Pintos complicó a velocidad al sector izquierdo albiceleste y fueron amonestados Camacho y Filgueira, por lo que éste último se perderá el partido del próximo sábado ante Peñarol.
Así como Cerro equivocó los caminos en búsqueda del arco locatario, Jorge Larrionda se equivocó en una jugada que pudo cambiar el trámite. Moiraghi bajó a Ravecca saliendo a cruzar y el árbitro amonestó a Pintos, quien pasaba cerca de la jugada pero nada tuvo que ver con la infracción. El zaguero de Defensor ya estaba amonestado, y debió ver su segunda tarjeta amarilla a los 32’.
Segundo tiempo albiceleste
Para la segunda mitad, Ortiz sacó al juvenil Mauricio Alonso, de escaso aporte, y colocó a Luis Machado para marcar mayor presencia en el área junto a Mastrianni, poco abastecido en el primer tiempo y decisivo en el segundo.
En los primeros 10 minutos del complemento, Cerro metió contra su arco a Defensor y estuvo cerca de la igualdad, pero empezó a levantar la figura de Fleurquin en el mediocampo, bien acompañado por Diego Ferreira, y el equipo de Repetto salió de un asedio fugaz.
Cuando parecía que la tormenta había pasado para los del Parque Rodó, otro pelotazo largo cerrense terminó premiando su perseverancia. La defensa local despejó a medias y el esférico quedó picando a pocos metros del área a pedir de Mastrianni. El goleador definió de primera y su remate, que se desvió en la pierna de Arias, fue a parar a la red.
A esa altura el segundo tiempo era mucho mejor que el primero, y por si alguna duda quedaba apareció Aleman para sacudir el caño izquierdo de Rolero en un tiro libre donde la pelota pegó dos veces en el fierro, por impactar en la espalda de Rolero, pero finalmente no entró. Poco después, el zurdo le volvió a apuntar al arco pero reventó el horizontal.
Empezaba a hacer merecimientos Defensor, que ya tenía en la cancha a Nicolás Olivera, pero la suerte que ya había acompañado a Cerro cuando lo salvaron los palos, le volvió a hacer un guiño a 15 minutos del final. Trepó Filgueiras y mandó un centro bajo por izquierda, no llegó Mastrianni pero se la llevó puesta el zurdo Diego Rodríguez y batió a Irrazábal.
No era merecido ni cerca el 2-1 para los de la Villa, que a partir de esa incidencia empezaron a manejar mejor la pelota y jugaron con la ansiedad del dueño de casa. Entró bien Queiro, impuso en el área Machado, y justamente al tacuaremboense le cometieron la falta que le permitió al capitán ampliar la ventaja.
Arias lo agarró innecesariamente y Óscar Javier Morales, de gran partido y mejor Torneo Apertura, le pegó duro para vencer la resistencia del meta violeta a los 81’.
Parecía liquidado, pero Guillermo De los Santos agarró en su área a Fleurquin, Larrionda sancionó acertadamente la pena máxima y expulsó al zaguero. Alemán tuvo su revancha desde el punto penal y le puso dramatismo al cierre.
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