Visitamos dos exposiciones, una en el MNAV (Julio Herrera y Reissig esq. Tomás Giribaldi) y otra en el SUBTE (Plaza Juan Pedro Fabini), de artistas nacionales presentes en distintos momentos de nuestra historia. La primera celebra el trabajo del pintor Manuel Rosé, activo a mediados del siglo pasado, y la segunda es una exhibición colectiva de once artistas contemporáneos que están en el auge de su proceso creativo.

Dos hombres a caballo (izq) - Nombre de la obra: El prisionero | Más hombres a caballo peleando (der) - Nombre de la obra: Duelo

Manuel Rosé

Quedan muy pocos días para visitar la muestra de Manuel Rosé en el Museo Nacional de Artes Visuales (MNAV), que termina este domingo. Se trata de 26 pinturas que ilustran escenas cotidianas, paisajes y personajes típicos del Uruguay de aquella época, como han hecho tantos artistas de nuestro país. Las obras de Manuel Rosé, sin embargo, son distintivas. En la introducción a la muestra hay una cita del escultor uruguayo Ramón Cuadra Cantera diciendo que, lo que diferencia a este pintor de otros, es la creación del "clima" donde se desarrolla cada uno de los motivos de sus obras.

La creación de un "clima" o un ambiente en una obra de arte se puede lograr de muchas maneras y es difícil de describir, pero podemos sentirlo si lo buscamos. El manejo del color en las pinturas de Rosé, por ejemplo, le permitió crear cuadros llenos de contrastes de luces y sombras, ilustrando situaciones que nos pueden parecer alegres y vivas, u oscuras, tristes, y hasta tenebrosas. Otros detalles que nos pueden dar una idea del ambiente que envuelve a cada imagen son las expresiones de los personajes, la sensación de movimiento, y los ángulos desde donde miramos. Todo esto nos ayuda a imaginar qué está sucediendo y por qué el artista decidió inmortalizarlo.

Mujer con vestido amarillo (izq) - Nombre de la obra: Tipo de española | Mujer desnuda (der) - Nombre de la obra: Desnudo

Personalmente, las obras me parecieron tristes e incluso no pude evitar sentir un dejo de melancolía hasta en las escenas más luminosas y coloridas. Hay un tema recurrente de payasos retratados con distintas expresiones, que se pueden asociar a la alegría del circo pero también lo muestran como un personaje infeliz, sensible y solitario. Muchos retratos muestran manchas en lugar de caras y figuras con gestos serios o cabizbajos. De todas formas, otros espectadores podrían enfocarse en distintos detalles y percibir sensaciones opuestas, de optimismo o entusiasmo, lo que hace aún más importante ver las obras en vivo para buscarles una interpretación propia.

Temporada #3

Por otro lado, la exhibición "Temporada #3" está hasta el 16 de setiembre en el Centro de Exposiciones SUBTE, un lugar que hace tiempo apuesta a potenciar el arte contemporáneo nacional. La muestra se organizó a través de una convocatoria pública sin limitaciones de marco temático o propuesta curatorial. El resultado fue la selección de once artistas cuyas obras se extienden a través de distintos intereses, perspectivas, lenguajes y disciplinas, como la fotografía, la instalación, la pintura y el video. El artista Raúl Álvarez (Rulfo) presenta la exposición como una manera de descubrir "cuales son los motores de reflexión estética en la actualidad".

Tríptico de fotografías rosadas - Nombre de la obra: Descomposición. Artista: Ciro Jaumandreu

Las obras están expuestas en la sala principal, que es lo suficientemente grande para mostrar cada una en su propio espacio independiente. Primero nos encontramos con dos instalaciones; una casa de juguetes rebosando de objetos que contrasta los primeros años de vida con el universo de la vida adulta, por Santiago Grandal, y tres consolas de videojuegos por Juan Manuel Ruétalo Luccini, llamadas "Glicheras", modificadas para que generen fallas gráficas en la pantalla, pudiendo jugar con la consola y transformar lo visual al mismo tiempo.

Caminando en círculo, nos encontramos con fotografías nocturnas de paisajes vacíos por Nicolás Vidal, capturando una ciudad fantasma entre temporadas de verano, y un óleo de Diego Píriz que pone en diálogo distintos lenguajes visuales. Todo esto ocurre bajo escalofriantes susurros que dicen "no me vas a encontrar", parte de una instalación de Ana Laura Luján que trata con el concepto de vigilancia en la era digital. El paradigma digital y las perspectivas alteradas que éste provoca es un tema que también está presente en las fotografías de Ciro Jaumandreu. Más adelante vemos la obra de Lucía Aguirregaray, hecha con objetos encontrados y papeles cortados y cosidos en un collage de pequeñas instalaciones.

Finalmente, somos enfrentados por una serie de fotografías de jóvenes en escenas nocturnas del ambiente "underground y diverso", por Antonella Moltini, y una pintura en acrílico sobre tela que nos mueve a observar con una mirada fresca, con subjetividad y posibilidad. Luego, nos dirigimos a una instalación participativa por Ernesto Rizzo, que invita a estampar con una plancha modificada la clásica obra "América Invertida" de Joaquín Torres García, y así experimentar el arte de la apropiación; incluso nos podemos llevar un recuerdo que nos haga reflexionar sobre el alcance de la autoría y el robo de material intelectual.

Consola con tres pantallas - Nombre de la obra: Glicheras, las Máquinas de Fallar. Artista: Juan Manuel Ruétalo Luccini

Por último, entramos a un cuarto negro en el medio de la sala para presenciar una videoinstalación donde el tiempo mismo parece estar suspendido.

Bonus Track: René, una instalación y performance por Luis Flieller y Pablo Auliso

El próximo domingo es el último día que podés presenciar la obra "René" en la Sala M del Centro de Exposiciones SUBTE. En ella, somos espectadores de un micro mundo que parece haber sido tapizado de tela cuadrillé por el personaje principal, que también está cubierto de pies a cabeza con este material.

Performance con tela cuadrillé - Nombre de la obra: René. Artistas: Luis Flieller y Pablo Auliso

La performance es perturbadora porque parece que, sin saber cómo o por qué, el personaje se vio en un estado en el que necesitó camuflarse, a tal extremo de tapar sus propios ojos, nariz y boca. Ya no sabemos si es humano, pero lo que queda de él continúa cosiendo obsesivamente el cuadrillé, en un afán de volverse invisible, aunque lo lleve al límite de su existencia.

Muchas veces nos emocionamos, con razón, cuando se exponen obras internacionales o de renombre, pero hay que considerar que nos podemos conmover tanto o más con obras de otros artistas, aunque sean menos reconocidos. Cuantas más muestras visitemos y más diversas sean, aumentamos las chances de encontrar un artista que nos transmita algo sustancial, nos invite a la reflexión, o nos acerque a otras maneras de ver el mundo.

El contraste de Manuel Rosé con "Temporada #3" y "René" es interesante para develar la importancia de los diferentes contextos históricos y ver la evolución de nuestro arte. Aprovechá la oportunidad para descubrir y emocionarte con nuevos y viejos artistas nacionales.

Por Milena Brum