La Federación de Funcionarios de la Salud Pública (FFSP) propondrá a la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) la contratación de psiquiatras extranjeros para atender la situación “compleja” en materia de salud mental en Uruguay.

Durante un acto, el presidente de la federación, Martín Pereira, explicó que los especialistas uruguayos en salud mental “no agarran en los hospitales públicos” debido a que el salario que se les ofrece es de $500.000. En ese sentido, planteó: “¿No será hora también de pensar en la salud mental que se puede atraer profesionales de otro país?”, con el objetivo de “terminamos con esta corporación que está poniendo de rodillas a todo el país, a todos los uruguayos que están de rehenes”, afirmó.

En diálogo con Montevideo Portal, Pereira aseguró que “el acceso a la salud mental es complejo” y explicó: “Nosotros [trabajadores de la salud] lo vivimos, conseguir acceso a profesionales de la salud mental es algo que nos complica y a la población en general también”.

Ante esta situación, el presidente de la FFSP sostuvo que “hay que buscar alguna solución y que no sea a largo plazo”, ya que el “problema no es de ahora sino de ayer, por lo que se debe buscar algo inmediato para poder avanzar en esta situación”.

En la misma línea, consideró que también deben impulsarse medidas estructurales, como la formación de nuevos profesionales, la radicación de docentes en el interior y la descentralización de las carreras universitarias, para evitar que los estudiantes deban trasladarse a Montevideo para formarse.

Sobre la falta de profesionales uruguayos en ASSE, Pereira afirmó: “Entendemos que se debe regular y que no deben funcionar las reglas del mercado dentro de la salud, porque el sector privado o trabajar particular dará mayores dividendos a los profesionales, pero tenemos 1.300.000 usuarios de salud pública que quedan rehenes de esta situación”.

Según un informe del Ministerio de Salud Pública (MSP), la tasa de suicidio en Uruguay durante 2024 fue de 21,35 por cada 100.000 habitantes. Al detallar por sexo, el estudio señala que la tasa fue de 33,3 en los hombres y de 10,1 en las mujeres, una diferencia que se mantiene estable desde comienzos de siglo.

En cuanto a la edad, las cifras más elevadas corresponden a personas mayores, el grupo de 85 a 89 años registró una tasa de 38,2 por cada 100.000 habitantes, seguido por los mayores de 90 años (37,6). Sin embargo, también se observó un incremento preocupante entre los jóvenes de 20 a 24 años, con una tasa de 33,2, la más alta registrada históricamente para ese rango etario.

A nivel departamental, Treinta y Tres registró una tasa de 37,7, Río Negro 35,5 y Rocha 34,9, todos por encima del promedio nacional. El informe también señala que las mayores tasas de autoeliminación se dan entre los mayores de 80 años (34,84) y los jóvenes de entre 20 y 24 años (33,21).