De mí

Jéssica García Moreno tiene 24 años y dos hijas, Ambar (3) y Diana (1) y rompió el silencio en una entrevista con Ciudad.com en la que habló sobre su padre. A los trece años comenzó su batalla judicial por ser reconocida como hija del artista, quien tuvo un fugaz romance con la madre de la joven, Fernanda Toce.

La joven, que llama "Charly" a su padre, dice que le cuesta ponerse en contacto con él por "las trabas que le impone el entorno de su padre".

"Me fui acercando de a poco, hasta que hubo más confianza. Siguió el contacto, pero visitándolo siempre yo a él y no él a mí, como debería ser. A pesar del juicio, teníamos una buena relación, pero muchas veces cuando fui a su casa me encontré con cosas extrañas, hasta que tuve que asumir que él es así y que es su vida", dijo.

Sobre la salud de su padre y las fuertes declaraciones de su hermano Miguel, quien criticó duramente a Palito Ortega y a la novia de García, la joven coincidió "con todo".

"Que la gente lo vea gordo en comparación de tantos años que estuvo flaco, casi arruinado, no significa que esté bien. Ni Migue, ni yo, ni nadie sabe qué pastillas le están dando. No sabemos si le dieron algo y engordó por casualidad, o si lo hicieron engordar a propósito para que la gente piense que está bien", dijo.

"No es el mismo Charly que era antes. Te doy mi punto de vista: cuando Charly estuvo en el Dharma (clínica psiquiátrica), yo fui todos los días a visitarlo, hasta con Ámbar, su nieta, que era chiquita. Después que pasó esto con Palito se cortó el trato por completo. En un momento pensé en llevarlo a mi casa (...) No me dejan acercarme, ni Palito ni su círculo. Con Charly tenía la mejor, no venía a visitarme pero me llamaba", dijo.

La joven contó que a su padre lo vio por última vez en julio de 2008, cuando fue a visitarlo por el Día del Padre. "Cuando yo salí, entró Palito y ese fue el último día que lo vi. Creo que Charly está así conmigo por culpa de ellos. No puede ser que después del buen trato, de repente no quiera saber más nada".

"Ellos piensan que lo están salvando y sinceramente, para mí, lo están llevando a la ruina. Y le están haciendo gastar un montón de plata en cosas que no tendría que gastarlas. Yo en ese sentido mucho no puedo opinar, pero es mi viejo. Y te aclaro algo mío: lo que yo tengo se lo debo sólo a mi marido. La verdad es que no nos falta nada. En aquel momento habrán pensado que yo quería la plata de Charly. Jamás le pedí nada, ni le voy a pedir", aclaró.