Unidad Popular espera acuerdo para aprobar su ley de Vivienda Popular

El diputado de Unidad Popular Eduardo Rubio se manifestó optimista respecto de conseguir los votos necesarios para aprobar en la Cámara de Diputados su proyecto de "Vivienda popular", que permitiría a establecer un tope a las cuotas para la compra de viviendas para familias de bajos y medianos recursos.

Rubio dijo a Montevideo Portal que este martes quedó definido que el proyecto de ley será votado en el plenario de Diputados el próximo martes 13. A través de sus redes sociales, Unidad Popular convocó a sus militantes a concurrir a las barras de la Cámara para "acompañar" al legislador en su defensa de la iniciativa.

El diputado dijo que "hay acuerdo en la oposición para votar el proyecto". En efecto, el viernes pasado el senador y líder del sector Todos Luis Lacalle Pou incluyó el texto de Rubio entre las iniciativas de legisladores de otros partidos que su sector está dispuesto a votar.

Rubio señaló, además, que hay legisladores del Frente Amplio que estarían dispuestos a prestar sus votos para aprobar el proyecto. En esa lista mencionó a los diputados del sector Liga Federal Darío Pérez, de Maldonado, y Sergio Mier, de Treinta y Tres, y el socialista Federico Ruiz, de Flores.

"Se generó una buena oportunidad para que se apruebe, aunque la política es muy dinámica y faltan muchos días", aclaró.

El proyecto de ley de Rubio crea un Fondo Nacional de Vivienda Popular por Construcción Pública, cuyo presupuesto saldrá directamente de Rentas Generales y estará destinado a ejecutar el Plan Nacional de Vivienda Popular, administrado por la actual Agencia Nacional de Vivienda.

El texto obliga al Estado a hacerse cargo de la construcción de las viviendas a través de licitaciones, priorizando la elección de empresas locales, nacionales o cooperativas de trabajo. Además, los materiales deberán ser suministrados por el Estado "al menor costo posible".

En su artículo 19, el proyecto especifica que los destinarios del plan serán "personas o núcleos familiares cuyos ingresos nominales sean iguales o menores a 20 Bases de Prestaciones y Contribuciones", monto que actualmente equivaldría a 76.960 pesos. El texto establece que no se tendrá en cuenta la edad de los beneficiarios ni "los antecedentes crediticios y financieros" ni se exigirá ahorro previo.

Las familias abonarán las viviendas en cuotas cuyo monto no podrá superar el 10% de los ingresos mensuales del núcleo familiar. Los pagos se harían "hasta amortizar el valor de la vivienda o por un plazo máximo de 25 años si no se llegara a amortizar".