Un venezolano caminó 32 días hasta el Chuy

Pedro, de 27 años comenzó su travesía en con un ómnibus hasta Puerto Ordaz, para cruzar hasta territorio brasileño, según contó este domingo el diario El País. Si bien en un primer momento pensó que podría quedarse allí, entendió que no era el mejor ámbito para los venezolanos, por la situación política y la migración como parte de la campaña electoral.

“Cuando se encienden las cámaras de la televisión, el campamento de refugiados de Roraima parece un refugio modelo. Pero cuando se apagan, se nota la realidad. No hay agua potable, no hay privacidad ni una ducha de agua caliente. Los que menos tienen, tratan de abusar de los que tienen más; y los que tienen más, se aprovechan de los que menos (…) lo que viví no se lo deseo ni al peor de los enemigos", contó al matutino.

El joven venezolano cruzó hasta Brasilia y de allí a Porto Alegre, pasando varios días de sin comer. Si bien pensaba seguir viaje hasta Santiago de Chile, otros compañeros de viaje lo convencieron que se quedara en Uruguay.

Como ventaja, nuestro país ofrece una recepción más orientada a lo laboral que les permite insertarse con mayor facilidad en el mundo del trabajo. En el Chuy Pedro contó con el apoyo del Municipio de la localidad rochense y la Organización de la Sociedad Civil, Idas y Vueltas.

Allí recibió comida, abrigo y los contactos necesarios para comenzar a hacer trabajos de jardinería y pintura.

En conversación con Montevideo Portal la alcaldesa de Chuy Mary Urse dijo que en pocos meses llegaron unos 300 cubamos y algunos venezolanos, dominicanos y colombianos, que reciben ayuda del municipio para conseguir algún trabajo. Según explicó Urse muchos siguen viaje a Montevideo o Maldonado, pero otros deciden quedarse en el Chuy, donde los migrantes son bien recibidos.