Contenido creado por Martín Otheguy
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Vivir para contarlo

Tras un increíble accidente, británica internada en Uruguay pudo regresar a su país

Charlotte acampaba junto a su pareja dentro de un contenedor en las Islas Malvinas cuando un viento de 160 km/h lo levantó por los aires y lo arrojó a 200 metros.

07.03.2018 11:21

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2018-03-07T11:21:00-03:00
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Edd Hewett y Charlotte Bainbridge, dos ciudadanos británicos, estuvieron en Uruguay durante más de un mes (hasta esta semana), tras haber sufrido un espantoso accidente en las islas Malvinas. Charlotte fue la que salió peor parada y estuvo en tratamiento intensivo durante varias semanas en el Hospital Británico de Montevideo, recuperándose de heridas graves.

Amigos y familiares (que se alojaron durante ese tiempo frente al hospital) iniciaron una campaña en Crowdfunder para que la pareja pudiera regresar a Inglaterra, ya que en su accidente perdieron casi todo lo que llevaban. Finalmente, conseguido el dinero, este martes pudieron volar de regreso a Inglaterra.

La pareja estaba acampando en Cape Dolphin, en las Malvinas, cuando los alcanzó una tormenta inesperada. Habían optado por colocar su carpa al resguardo de un contenedor cuando la tormenta se volvió mucho más complicada de lo que se preveía. Al ver esta situación, Charlotte y Edd decidieron levantarse y armar campamento dentro del contenedor.

Pero una hora después, vientos de hasta 160 km/h lanzaron por los aires al contenedor, que se desplazó dando vueltas durante unos 200 metros con sus ocupantes dentro.

En algún momento en el medio del vuelo, Charlotte y Edd salieron despedidos del contenedor y quedaron inconscientes en plena tormenta. Al despertar, Edd se acercó a Charlotte y se dio cuenta de que no podía moverse. Ambos tenían síntomas de hipotermia y conmoción cerebral, pero Edd debió cargar con Charlotte y colocarla dentro del mismo contenedor, ya que no había otro refugio a la vista.

Luego, rastreó a campo abierto su kit de supervivencia y pudo encontrarlo en la oscuridad, con lo que practicó unos primeros auxilios básicos para paliar la hipotermia. Luego de descansar y calentarse un poco -y de acomodar lo mejor que pudo a Charlotte- se colocó una frazada hipotérmica entre sus ropas mojadas e inició una caminata de ocho kilómetros en la oscuridad hasta la casa más cercana.

Llegó hasta el lugar en medio de la noche, golpeó varias veces la puerta sin suerte, y finalmente tuvo que forzar la entrada y despertar a los residentes.

Foto que muestra dónde estaba originalmente el contenedor y dónde quedó tras la tormenta.

Con el auxilio de un equipo de emergencia, Charlotte pudo ser llevada en avioneta al hospital King Edward Memorial en Stanley, la capital de las Malvinas. Tenía cinco costillas rotas (algunas en varios lugares), daños en el pulmón, laceraciones en el hígado, tres dedos rotos y el omóplato destrozado. Estaba en estado crítico, pero la asistencia de emergencia permitió salvarle la vida. Una vez estabilizada, fue trasladada por la Fuerza Aérea Británica a Montevideo, donde quedó internada en el Hospital Británico.

En Uruguay, se le hizo otra operación para removerle un trozo del pulmón y se le colocaron refuerzos de titano en cinco de sus costillas. Tras semanas de recuperación, finalmente Charlotte recibió el alta y pudo viajar a Inglaterra. "Estamos abrumados por el amor y apoyo que recibimos", escribió Charlotte poco antes de partir.