Si algo les faltaba a las víctimas del huracán Florence, era la visita de Trump y sus comentarios

El presidente estadounidense Donald Trump no lidia muy bien con las tormentas y los desastres que ocasionan, incluso abarcando en la categoría a Stormy Daniels, la actriz porno que se convirtió en una piedra en el zapato de su administración.

Cuando Puerto Rico quedó asolada por el huracán María, Trump visitó el lugar y protagonizó algunas escenas muy criticadas, como cuando arrojó toallas de papel a las víctimas al mejor estilo basquetbolista. Además, se enredó en una discusión pública con las autoridades de la isla, a las que se refirió de forma despectiva.

Hace poco, mientras el huracán Florence se acercaba a la costa estadounidense, volvió a generar polémica al asegurar que en Puerto Rico murieron solo 18 personas a raíz del huracán, cuando el conteo oficial es de 3.000. Y, para hacer más risible el asunto, advirtió a la población que se cuidara de la nueva tormenta, a la que definió como "tremendamente grande" y "tremendamente húmeda".

Ahora, Trump está de visita en North Carolina para brindar ayuda a las víctimas del huracán Florence, aunque no parece haber aprendido mucho. Sus comentarios a los afectados por las inundaciones volvieron a generarle críticas.

En un momento, Trump le dijo a varias de las víctimas que llegaban a buscar comida y ayuda: "A pasarla bien" .

Lo más curioso, sin embargo, fue su obsesión con un yate. Uno de los afectados por la tormenta se quejaba de que, además de todos los problemas ocasionados por la tormenta, las aseguradoras no querían reparar los daños ocasionados a su vivienda por un yate arrastrado por el huracán Florence.

"¿Es tu bote? ¿O se convirtió en tu bote?", le preguntó al dueño de la casa. Cuando el hombre le dije que no, sonrió y replicó: "Al menos conseguiste un lindo barco en todo este asunto".

El yate se convirtió en un tema central para Trump. Poco después, siguió preguntando por el bote en cuestión. Consultó a periodistas y vecinos: "¿Ese yate está arruinado, no?". Le dijeron que parecía en buen estado y continuó: "Yo no cruzaría el mar en él".

Luego, un periodista le preguntó qué pensaba de lo que había visto hasta ahora en el lugar del desastre. Y Trump seguía con el bote en mente. "Pienso que es increíble. Ver lo que estamos viendo... este yate. No sé qué pasó, pero este bote apareció acá,. ¿Y sabés de quién es? Nadie sabe de quién es", contestó.