Contenido creado por Ignacio Palumbo
Locales

Círculo vicioso

Según Metsul, la ola de calor “agrava” la sequía y viceversa

La seca “favorece” a temperaturas “más intensas”, que rondarán los 41 y 43 °C. Esto “puede derivar en incendios”, alerta el observatorio.

10.01.2022 12:55

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2022-01-10T12:55:00-03:00
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Montevideo Portal

El observatorio meteorológico de Brasil, Metsul, continúa advirtiendo acerca de una potente ola de calor que se dará esta semana.

De acuerdo con una nueva información que divulgó el laboratorio, este fenómeno —que golpeará a nuestro país, Argentina y Rio Grande do Sul— “será un ejemplo clásico de un clima compuesto extremo”. “Si los extremos en el planeta se han vuelto cada vez más frecuentes, los compuestos terminan volviéndose más comunes. Son varias las situaciones extremas que se dan simultáneamente, agravándose unas a otras”, establece Metsul en un comunicado difundido en su página web.

En este sentido, se aclara que los compuestos extremos “pueden generar mayores impactos en la sociedad y el medio ambiente que los extremos individuales por sí solos”. A modo de ejemplo, señalan que las sequías asociadas con olas de calor o inundaciones costeras vinculadas con vientos intensos son casos de compuestos extremos.

“En el caso de esta semana, el centro de Sudamérica tendrá una poderosa ola de calor (extrema) en medio de un escenario de sequía fuerte a severa (otro extremo) que puede derivar en incendios (consecuencia extrema). La sequía favorece una ola de calor más intensa y, a su vez, el calor agrava la sequía”, sostiene el observatorio.

Metsul detalló, a su vez, cómo se retroalimentan ambos fenómenos. En primer lugar, señaló que tendrá un “gran impacto” en la agricultura, “secando ríos y problemas en el suministro de agua” para el consumo en Argentina, Uruguay y Rio Grande do Sul.

“Las olas de calor intensas ocurren en los meses calurosos del año con o sin sequía, en veranos secos o lluviosos, pero históricamente se observa que los episodios de calor más extremos ocurren durante sequías. Esto se debe a un proceso de interacción tierra–atmósfera en el que la sequía hace que la atmósfera sea aún más seca y, con aire más seco, la temperatura aumenta más en un mecanismo de retroalimentación positiva”, explicó Metsul.

Dicho esto, el laboratorio reconoció que la ola de calor que azotará nuestro país tendrá temperaturas “muy por encima de la climatología normal de enero”, con máximas de hasta 10 °C a 15 °C por encima de los promedios históricos. Sin embargo, los modelos aún no coinciden en cuánto puede alcanzar la temperatura. “La tendencia, según el análisis de MetSul, es para marcas de hasta 45 °C a 47 °C en los lugares más cálidos de Argentina y de 41 °C a 43 °C en Uruguay”.

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