Contenido creado por Martín Otheguy
Locales

Alguien voló sobre el nido

Párroco de Fraile Muerto vinculado a denuncias de abuso de menores huyó del país

El religioso volvió a Colombia, su país de origen, pese a que la diócesis le había dicho que no podía hacerlo hasta que se aclarara el hecho.

24.08.2018 08:35

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2018-08-24T08:35:00-03:00
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En las últimas semanas comenzaron a aparecer algunas pintadas en la localidad de Fraile Muerto, Cerro Largo, en las que se acusaba al ex párroco de la iglesia local de tener relaciones sexuales con dos menores de edad.

Según informó el actual párroco, Ignacio Aguirre, al diario El Profesional, el religioso "fue víctima de algunas acusaciones públicas que hubo en esa ciudad" dijo. En las paredes del gimnasio municipal de esa ciudad aparecieron leyendas que aludían a estos hechos sexuales.

"Debido a esto se sintió tenso y nervioso y se decidió que prestara servicios en otra parroquia mientras se sustancia la investigación", dijo. Sin embargo, el religioso "decidió viajar a Colombia, su tierra de nacimiento, de origen, y nos pidieron a nosotros asumir la titularidad en esta parroquia", contó.

Además, el nuevo párroco descubrió -al hacerse cargo del lugar- que faltaban muchos artículos en la iglesia (herramientas, muebles, adornos, antigüedades), por lo que decidió hacer la denuncia policial. Un albañil contratado por el anterior párroco es el sospechoso del hurto.

Hoy, el diario El País da algunos datos más sobre este religioso de 52 años, originario de Colombia. Estuvo al frente de la parroquia de Fraile Muerto durante seis años.

La acusación sobre el ex párroco es investigada por la Iglesia pero no por la Policía, al menos aún.

"En uno de los escritos aparecía una persona solo con el nombre, en otra pintada, con su nombre y apellido, y en otra parte de la pared el sobrenombre de otro individuo, todos del sexo masculino, dando a entender que el sacerdote mantenía relaciones sexuales con ellos", dijo el obispo Heriberto Bodeant al diario El País.

El párroco señalado aseguró que todo era mentira, que estaba estresado y que quería volver con su familia. "Yo le respondí que no podía retirarse de esa forma, huyendo. Y, que antes de cualquier actitud, todo eso debía ser aclarado y que yo no lo autorizaba a retirarse y no compartía su decisión", dijo Bodeant. El ex párroco, sin embargo, decidió huir. Ante este hecho, fue suspendido por la iglesia.

No es el único caso indagado en Melo en los últimos años. En el 2016, el párroco de la Catedral de Melo renunció en medio de una investigación por presuntos abusos sexuales, aunque en aquella ocasión Bodeant aseguró que no había cometido ningún delito y que su renuncia se debía a una decisión personal. Otros dos sacerdotes estaban implicados en esa denuncia.