Ex financista de Néstor Kirchner vinculado a la ruta del dinero K hizo 164 viajes a Uruguay

El caso de los "cuadernos de las coimas" en Argentina revivió las investigaciones de la ruta del dinero K y el papel de Uruguay como posible destino para el lavado de dinero de actividades corruptas.

Ayer, reportábamos que un estudio del cuaderno del chofer Oscar Centeno, comparado con la bitácora de vuelos del ex secretario privado del ex presidente Néstor Kirchner, Daniel Muñoz, reveló que este último hizo decenas de viajes a Uruguay en los mismos días en que recibía bolsos con dinero.

Hoy, Clarín reporta un caso aún más extremo. El financista de Kirchner, Ernesto Clarens, hizo 91 viajes relámpago a Uruguay en barcos privados, de un total de 164 traslados a nuestro país. En varios de estos viajes coincidió con Daniel Muñoz y con uno de los recolectores de pagos ilegales. Lo llamativo de este caso, apunta el medio argentino, es que se trasladó en embarcaciones a pesar de tener una compañía de taxis aéreos.

Clarens fue señalado por empresarios de la construcción como protagonista de una maniobra por la que se habrían movido más de 200 millones de dólares al exterior. Ya había sido vinculado por Leonardo Fariña -el valijero arrepentido- con un caso de blanqueo de coimas.

El financista era un bróker de bolsa en la década de los 90, pero adquirió más relevancia cuando Kirchner era gobernador de Santa Cruz y autorizó a su empresa Credisol a entregar créditos a empleados públicos provinciales.

Cuando los Kirchner llegaron al poder, se intensificaron los viajes de Clarens a nuestro país. Según Clarín, el financista se dedicó  a armar una red de firmas y cuentas offshore en el exterior.

El testimonio de Clarens podría tener impactos en la investigación, ya que su financiera Invernes SA es investigada en diversas causas vinculadas a la denominada "ruta del dinero K", por la que se encuentra detenido el empresario Lázaro Báez. Clarens era parte de la estructura financiera que posibilitó que se blanquearan más de 60 millones de dólares, de acuerdo a la investigación.

Clarens "se acostumbró a cruzar en embarcaciones privadas a Carmelo, donde frecuentaba el exclusivo barrio privado El Faro", indica Clarín. A Uruguay fue 91 veces en embarcaciones privadas, pero también usó un helicóptero propiedad del lobista Jorge "Corcho" Rodríguez.

Clarín asegura que de esta manera Clarens se aseguró viajar siempre por una vía distinta a Daniel Muñoz, quien según el chofer Centeno era quien recibía los bolsos con millones de dólares de las coimas. Las visitas a Uruguay de ambos coincidieron en siete ocasiones, a veces con diferencias de una hora entre las salidas y retornos de los dos, pero siempre yendo y volviendo separadamente.