Contenido creado por Gerardo Carrasco
Internacionales

No todo es político

Embajador paraguayo pide no politizar papel de Uruguay en refugio a requeridos

Rogelio Benítez, representante diplomático del Uruguay, se entrevistó con la vicepresidenta Lucía Topolansky.

11.10.2019 07:04

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2019-10-11T07:04:00-03:00
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El embajador paraguayo en Uruguay, Rogelio Benítez, dijo que confía en que la postura de ese país de otorgar refugio político a tres activistas de izquierda reclamados por la Justicia paraguaya no sea "politizada ni ideologizada", después de que la medida sirviera para que Finlandia les diera cobijo esta semana.

Tras dos meses en Uruguay, los paraguayos Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Colmán llegaron el miércoles a Helsinki gracias a una decisión de una jueza uruguaya y a la intercesión del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

Los tres están requeridos por la justicia paraguaya por su presunta participación en el secuestro de María Edith Bordón, nuera de un exministro de Hacienda paraguayo, en noviembre de 2001, y liberada a los 64 días de cautiverio tras el pago de una suma de dinero.

Benítez fue llamado a consultas por su Gobierno para explicar esa medida, que calificó de "dolorosa" para los paraguayos.

Recalcó además que Paraguay desconoció la situación de los tres hombres hasta la noche del martes, ya que el proceso de concesión de refugio es confidencial en Uruguay.

El embajador aseguró que había agotado todas las vías diplomáticas para informar a las autoridades uruguayas de lo que Paraguay considera "un tema de criminalidad común", y llegó a reunirse con la vicepresidenta, Lucía Topolansky.

"Ella es senadora, presidenta de la Asamblea y vicepresidenta. Me decía que Uruguay tiene una larga tradición de hospitalidad en conceder este tipo de situaciones, pero que Uruguay no es refugio de criminales, como dándome a entender que se entendía que esto no tenía un sesgo político, mucho menos ideológico", comentó Benítez.

El embajador insistió en que Paraguay y Uruguay mantienen sus relaciones diplomáticas, que siempre han sido "inmejorables".

La actuación de Uruguay provocó un enorme descontento entre las autoridades paraguayas, que esta vez veían posible la extradición de los tres hombres, después de que el pasado julio escaparan de Brasil, donde les acababan de retirar el refugio político tras 17 años de residencia.

Supuso además un revés después de que Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) absolviera al Estado paraguayo, por falta de pruebas, de la demanda por torturas presentada por Arrom y Martí.

En enero de 2002, ambos denunciaron haber sido secuestrados y torturados durante catorce días por agentes vinculados con los cuerpos de seguridad del Estado para que admitieran su responsabilidad en el secuestro de Bordón.

EFE