Directora de INR: "Sacás un celular pero en dos, tres días el preso consigue otro"

El uso de teléfonos celulares por parte de reclusos tuvo una nueva etapa de discusión en las últimas semanas, luego de que un barra brava de Peñarol que está preso ordenara a través de su teléfono el asesinato de un hincha de Nacional.

Varias autoridades señalaron la inconveniencia de hacer cumplir a rajatabla la prohibición del uso de celulares, desde el mismo Eduardo Bonomi (quien dijo que es un tema en discusión) al fiscal Jorge Díaz y el comisionado parlamentario para las cárceles, Juan Miguel Petit.

Una nota del semanario Búsqueda de este jueves revela que no importa la cantidad de requisas que se realicen, los celulares siempre aparecen. En 2018 se encontraron unos 800, por ejemplo. En los últimos años, aunque no aclara desde cuándo, se detectaron 6.000.

El Ministerio del Interior intentó usar inhibidores de señal, pero según el mismo Bonomi explicó a Sarandí semanas atrás, las empresas telefónicas aumentaron la señal, volviéndolos inútiles.

Según las fuentes que maneja Búsqueda, la decisión de las telefónicas no fue responsable de que no funcionen las señales, sino que lo que sucedió es que en cárceles como el Penal de Libertad y Santiago Vázquez los inhibidores de frecuencia fueron vandalizados al estar colocados en zonas donde acceden los presos.

Ana Juanche, directora del INR, dijo a Búsqueda que la política de permitir comunicaciones vía celular que tiene actualmente la institución es la adecuada, ya que la prohibición "genera unos mercados paralelos que son impresionantes".

Hay un instructivo de la institución que permite los móviles en las unidades de mínima seguridad siempre que los presos no tomen fotografías. En esas unidades, dijo Juanche, es "una ridiculez prohibir el uso de los teléfonos".

En cuanto a las prisiones de máxima seguridad a la jerarca le gustaría aplicar el mismo reglamento si se pudieran tener medios como para hacer un uso controlado, pero que el problema es que actualmente no existe esa capacidad.

La jerarca también dijo que "hay que garantizar que los funcionarios tengan unos salarios que les permitan no tener que morder coimas para subsistir", porque "los celulares entran con la visita, entran con funcionarios, entran en camiones de proveedores". "Nos ha pasado que sacás un celular pero en dos, tres días el preso consigue otro, es impresionante. La gente que teje redes es impresionante", dijo al semanario.