Inglaterra prohibirá venta a menores de bebidas energéticas a base de cafeína

El ministerio de Salud británico ha lanzado alertas sobre el consumo excesivo de estas bebidas energéticas, ricas en cafeína y azúcar, asociadas a un "catálogo de problemas de salud" que van desde los dolores de cabeza, problemas de sueño y digestión. La preocupación crece debido a que se las considera también como combustible para la hiperactividad de los niños, tal como las calificó el NASUWT, uno de los mayores sindicatos de profesores del Reino Unido, a finales de 2017.

"Pedradas listas para consumir" fue la expresión usada por la organización para describir estas bebidas que asocian al mal comportamiento en las escuelas, dentro y fuera del aula, según informara el periódico The Telegraph.

La postura del sindicato docente es apoyada por un estudio del Centre for Translational Research in Public Health de la Universidad de Teesside, que confirmó que las bebidas energéticas eran más baratas que el agua o los refrescos convencionales. Uno de cada tres niños consumía regularmente bebidas como Red Bull, Monster y otras marcas de estas bebidas, según esta investigación.

La alerta no es de hoy. Un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Europa, mostraba ya en 2014 una preocupación por la creciente popularidad de las bebidas energéticas y las "consecuencias negativas de su consumo entre niños y adolescentes, incluyendo efectos en los sistemas neurológico y cardiovascular, que pueden causar dependencia física y vicio", cita el periódico The Guardian.

La propuesta de la primera ministra británica, Theresa May, sobre la aplicación de la ley será revelada en las próximas horas. La única duda que persiste tiene que ver con la edad de la prohibición de venta de las bebidas, que podría fijarse en 16 o 18 años.

"Miles de jóvenes consumen regularmente bebidas energéticas, muchas veces porque son más baratas que las gaseosas", dijo Theresa May en un comunicado en el que anunciaba la consulta pública de la propuesta.

"Todos tenemos la responsabilidad de proteger a los niños de productos que perjudican su salud y educación", aseguraba el secretario de Estado de Salud Pública, Steve Brine, en el mismo comunicado.

Las multas por venta de bebidas energéticas pueden llegar hasta las 2500 libras (unos 103.700 pesos), el mismo importe que se aplica a quienes venden cigarrillos a menores de edad. La prohibición de venta en máquinas automáticas de Inglaterra también está siendo considerada.

Por ahora, la medida se aplicará en Inglaterra, pero podría extenderse en breve en el Resto del Reino Unido.

Esta prohibición se enmarca en una política macro que apunta a restringir la circulación y el consumo de productos poco saludables. Una de las más notorias fue la creación en abril pasado de un pesado impuesto sobre las bebidas azucaradas, como medida para combatir la obesidad. En julio de 2017 ya se había prohibido la publicidad de alimentos azucarados dirigida a niños.

En cuanto a las bebidas energéticas a base de cafeína, varias cadenas de supermercados ya habían decidido por su cuenta suspender su venta a menores de 18 años.