Inyecciones de bótox podrían aliviar la depresión, sugiere estudio

Las inyecciones de bótox que se utilizan para combatir a las arrugas y prevenir las migrañas también podrían ayudar a aliviar la depresión, sugiere un estudio reciente.

Los pacientes que recibieron inyecciones de bótox para cualquiera de seis afecciones reportaron que sufrían de depresión con una frecuencia de un 40 a un 88 por ciento más baja, en comparación con los pacientes que recibieron unos tratamientos distintos para las mismas afecciones.

"Este hallazgo es emocionante, porque respalda un nuevo tratamiento para afectar al estado de ánimo y combatir a la depresión, una enfermedad mental común y peligrosa, y se basa en un conjunto muy grande de datos estadísticos, en lugar de observaciones a escala limitada", señaló Tigran Makunts, que trabajo en el estudio cuando era estudiante de farmacia de la Universidad de California, en San Diego (UCSD). Ahora, es investigador en la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU.

En el estudio, los investigadores usaron datos del Sistema de Reportes de Efectos Adversos de la FDA sobre 40,000 personas tratadas con bótox, según informa HealthDay News.

Los datos se enfocan en el tratamiento con bótox por ocho motivos y lugares de inyección, que incluyen a la frente, el cuello, las extremidades y la vejiga. Entre otras cosas, las inyecciones de bótox se usan con frecuencia para tratar los espasmos musculares, la sudoración excesiva y la incontinencia urinaria.

La información no se recolectó para evaluar el efecto del bótox en la depresión.

Los investigadores dijeron que se necesita más investigación para determinar cómo el bótox puede funcionar como antidepresivo.

Una teoría es que el bótox podría ir a unas áreas del sistema nervioso central que están implicadas en el estado de ánimo y las emociones. O, como con frecuencia se usa para tratar afecciones crónicas que pueden provocar depresión, la mejora en el estado de ánimo podría ser un efecto secundario positivo de curar la afección subyacente.

Más de 264 millones de personas experimentan depresión en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud.

En general, la depresión se trata mediante psicoterapia o medicamentos. Pero esos tratamientos no resultan efectivos en casi un tercio de los pacientes. Ese es el motivo de que se necesiten otras opciones, anotaron los autores del estudio en un comunicado de prensa de la universidad.

"Durante años, los profesionales clínicos han observado que el bótox que se inyecta por motivos cosméticos parece aliviar la depresión de sus pacientes", comentó el investigador principal, Ruben Abagyan, profesor de farmacología de la UCSD. "Se pensaba que aliviar el ceño muy fruncido en la región de la frente alteraba un bucle de retroalimentación que refuerza las emociones negativas. Pero aquí encontramos que el mecanismo podría ser más complejo, porque en realidad no importa dónde se inyecta el bótox".

Se está realizando un ensayo clínico que evalúa en bótox en personas deprimidas. Pero como el ensayo solo está evaluando la inyección en la frente, quizá se necesiten otros ensayos para averiguar cuál lugar y dosis son mejores para tratar la depresión, añadió Abagyan.

El estudio se publicó el 30 de julio en la revista Scientific Reports.