Otra vez el Tottenham fue protagonist de un encuentro atrapante, con mucho ritmo de principio a fin y que lo tuvo como dominador y justo ganador.

En el clásico ante Arsenal el equipo de Pochettino se impuso por 2-0 y se mantiene a cuatro puntos del líder Chelsea.

En la primera parte, que mostró paridad en la tenencia del balón, el local se anotó más y mejores chances.

El arquero Peter Cech ya fue exigido antes del minuto por parte de Kane, quien más tarde generó otra chance de riesgo, desperdiciada de manera insólita por Delle Ali cabeceando abajo del arco afuera.

Las oprtunidades voliveron a aparecer cerca del descanso cuando Ramsey probó a Lloris en la valla del Arsenal. El francés respondió estupendo. También Alexis Sánchez con un tiro a colocar desde la puerta del área lanzó piropos al parante del meta.

Ya sobre los 45' el belga Vertonghen remató desde lejos y provocó otra gran tapada de Cech, figura de la primera parte en el arco de los Gunners.

Para la segunda parte el control de la pelota de los Spurs se acentuó. Con mayor dinámica y precisión, en base a lo que creaban Son y Eriksen, los locales se iban con todo por el gol de apertura.

La chance llegó a los 54', después de una maniobra notable del danés Eriksen, rebote en el palo y aparición de Harry Kane para mandar la pelota al fondo del arco.

El delantero inglés fue víctima dos minutos más tarde de un penal y él mismo se encargó de cobrarlo, dejando sin asunto al guardameta.

El tramo final Arsenal salió en busca del descuento casi sin inquietar. Gran victoria del Tottenham Hostspur, que se aseguró con esta victoria, terminar la Premier en la tabla, arriba de su clásico rival, algo que no sucedía desde el año 1995.