El presidente Tabaré Vázquez aceptó no construir más plantas de celulosa sobre el río Uruguay, tal cual pidió el gobierno argentino como primera concesión para iniciar el diálogo entre ambos países.
En el Consejo de Ministros de ayer, Tabaré Vázquez narró que Uruguay puso tres condiciones para las futuras negociaciones entre Uruguay y Argentina: que se levante el bloqueo, que esta medida no se repita en el futuro y que la planta de Botnia se quede en Fray Bentos.
Como contrapartida, desde Argentina Néstor Kirchner planteó como condición que Uruguay se comprometa a no construir nuevas plantas de celulosa sobre el río Uruguay. Esta condición fue aceptada por el gobierno, ya que había resuelto esta medida con anterioridad.
"En eso estamos de acuerdo, no se instalarán otras plantas. Uruguay no tiene proyectada ninguna otra planta", dijo Vázquez a sus ministros, según una crónica del diario El País. Tanto Ence como Stora Enso planean instalarse lejos de la frontera con Argentina y el río Uruguay, recordó el mandatario.
Una vez establecida esta condición, Tabaré Vázquez anunció que el diálogo entre los países podría iniciarse en Madrid a fines de febrero o principios de marzo.
Antes de fin de año, el mediador Antonio Yáñez se había reunido en Helsinki, Finlandia, con directivos de la empresa Botnia, de los que obtuvo su consentimiento para sumarse al diálogo. No se sabe aún si Finlandia participará también de las negociaciones.
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