En cada cumpleaños hay que piquetear

Hoy se cumplen dos años de corte sin interrupciones de la ruta 136. “Sabemos que ya está habiendo casos de animales y pescados muertos", afirman los asambleístas. Sin embargo, ayer se confirmó que fueron agrotóxicos de empresas argentinas los que mataron 30.000 pájaros en lo que va del año.

Un 20 de noviembre del 2006 los activistas de Entre Ríos se apostaban nuevamente sobre la ruta 136 con el objetivo de bloquearla, pero esta vez para quedarse definitivamente. Fue luego de aquel “alto al fuego” en espera de que Tabaré Vázquez detuviera temporalmente la construcción de Botnia, algo que finalmente no se dio.

En declaraciones a El Once Digital, la activista Gilda Veronesi dijo que “este lugar (en refrencia a Arroyo Verde) es un paradigma de la lucha de Gualeguaychú. Estos dos años fueron un período de aprendizaje y convivencia, sabemos que Botnia ya está contaminando nuestro medio ambiente, la cuenca del Río Uruguay y estamos dispuesto a seguir luchando hasta que se vaya”.

“La semana pasada, después que reanudara las actividades la empresa, los malos olores fueron terrible, inaguantable, varios se descompusieron. Además con afecciones en la piel según nos cuentan los amigos de Fray Bentos que pasan por el corte”, continuó.

Jorge Fritzler, otro conocido ambientalista, manifestó que “Botnia se limita a dar explicaciones y que habrá malos olores, que estos no tienen nada que ver con la contaminación lo cual es totalmente falso (…) Está habiendo casos de animales y pescados muertos, tenemos que comprobar que es producto de la presencia de Botnia. Ellos dicen que se debe a otra causa pero recuerdo que antes no pasaba y ahora sí, y con más frecuencia”, concluyó.

Sin embargo, el propio gobierno de Entre Ríos confirmó que la muerte de pájaros y otros animales se debió al abuso de productos químicos en la producción agraria, según reporta Página 12.

Según esta publicación, más de 30.000 pájaros murieron por “abuso de agroquímicos”, a lo que hay que sumarle el fallecimiento de halcones, zorros, y otros animales que se intoxicaron por alimentarse de los pájaros envenenados.

"La causa no vino desde el otro lado del río, sino de éste, y el responsable no fue un extranjero, sino “el más poderoso propietario de tierras de la zona”, según afirma la investigación de Página 12, en referencia a un estanciero que tiene 13.000 hectáreas en la zona

La publicación consultó a la Asamblea de Gualeguaychú, pero un vocero contestó que “es un tema que no dominamos, ya que la asamblea se formó alrededor del conflicto con Botnia”.