Contenido creado por Sergio Pintado
Locales

Escapados del corral

Cambios inconsultos de mutualistas

Andrea Guzzini se enteró de que había sido cambiada de mutualista sin su autorización un mes después de cerrado el corralito mutual, en el marco de una maniobra que aparentemente no es la única damnificada. El director de la JUNASA Luis Gallo dijo a Montevideo Portal que eso “no se puede hacer” y que el caso será investigado.

23.04.2013 18:23

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2013-04-23T18:23:00-03:00
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Montevideo Portal

El corralito mutual se cerró el 28 de febrero, pero no fue hasta el 26 de marzo que Andrea Guzzini se enteró de que había sido cambiada de mutualista sin su autorización, una maniobra de la que parece no haber sido la única víctima.

Según explicó Guzzini a Montevideo Portal, el 26 de marzo se presentó en un local de la mutualista COSEM, a la que estaba afiliada, para retirar medicamentos, pero no pudo hacerlo porque le dijeron que "ya no pertenecía" a esa mutualista, cuando nunca había realizado ningún trámite para abandonar la institución.

Guzzini debió esperar hasta el 1º de abril para concurrir al Banco de Previsión Social para plantear su situación ya que se enteró en plena Semana de Turismo del cambio. En el BPS le explicaron que se le había dado la baja en COSEM para ingresarla en el CASMU, con el número de solicitud 63938242 "sin mi autorización, sin mi firma y bajo total desconocimiento de mi parte".

"Yo cumplí todos los pasos para hacer la denuncia", afirmó Guzzini, indicando que en el CASMU le dijeron que se encontraba afiliada a la mutualista y le otorgaron "un número de teléfono para consultar" al que "llamo todos los días pero no me dicen nada". Según la afectada, "lo único que logré es que reconozcan que no existe un cupón de afiliación". También en esa instancia, desde la mutualista le aseguraron que "no es el único caso".

Guzzini también denunció la situación ante el Ministerio de Salud Pública, aunque le indicaron que era el BPS quien debía notificar la situación primero a la Junta Nacional de Salud (JUNASA) para que el ministerio pudiera tomar cartas en el asunto.

Una de las preocupaciones mayores de la damnificada es que ya tenía una consulta agendada con un especialista de COSEM, cuando se enteró del cambio. Además, sostiene que por el tratamiento que está siguiendo necesita medicación cada 30 días, algo que se le retrasa a raíz del cambio. Guzzini se quejó además de que el cambio la dejó sin emergencia móvil, ya que era una de los servicios que prestaba su mutualista anterior.

Si bien en el CASMU le dieron la lista de médicos de la mutualista y le informaron que, por estar afiliada, podía recurrir a ellos, Guzzini prefiere no utilizar esos servicios porque "después es más difícil reclamar, porque al usarlo estoy aceptando el traspaso".

Según Guzzini, este tipo de maniobras son impulsadas por las propias mutualistas. "Yo ya había sido socia del CASMU y cada vez que se abre el corralito tratan de reactivar a los socios antiguos. Se ve que un promotor firmó por mí, algo que no debería poder suceder", afirmó.

BPS Y MSP analizan el caso

En tanto, el director de la JUNASA Luis Gallo afirmó a Montevideo Portal que el pasaje de una mutualista a otra de forma inconsulta "es imposible, no se puede hacer". En ese sentido, instó a la damnificada a radicar la denuncia ante la Junta.

"Que haga la denuncia y se estudiará el caso y si se comprueba puede presentar incluso una denuncia penal", explicó el jerarca.

Gallo afirmó que el MSP no tiene conocimiento de que haya más casos como estos, pero aseguró que si les llega la denuncia será estudiado.

Sin embargo, la vicepresidenta del BPS María del Rosario Oiz dijo a Montevideo Portal que en los últimos años han surgido denuncias de casos similares, aunque remarcó que "son casos muy puntuales" dado que no "en dos millones de usuarios, no llegan a una docena".

Oiz explicó que ante este tipo de casos los usuarios que se sientan afectados deben radicar la denuncia, a partir de lo cual el BPS inicia una investigación. "Los inspectores van a la mutualista y solicitan el documento en el que consta la firma de la denunciante", indicó la jerarca.

Sin embargo, sostuvo que este tipo de investigaciones no siempre terminan con la constatación de una irregularidad, ya que "hay casos en los que se encuentra el documento firmado por el denunciante, que puede haber sido engañado o no, pero la firma está".

Este caso, en el que no habría un documento firmado por la usuaria, constituye según Oiz "un caso muy excepcional".

 

 

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