El arzobispo Monseñor Cotugno atacó al Estado por promocionar indiscriminadamente métodos anti-conceptivos y educación sexual, instó a promover la castidad y denunció los intentos por legalizar el aberrante matrimonio homosexual.
Con motivo de la primera jornada arquidiocesana sobre vida y familia, el monseñor Nicolás Cotugno realizó un discurso que fue reproducido tanto por el semanario Entre Todos como por el diario El País.
En él, Cotugno afirma que el gobierno está promoviendo una serie de iniciativas que son una "amenaza para la integración familiar" y tienden a consolidar "situaciones patológicas y de anormalidad".
El arzobispo cuestiona que el Estado promueva la utilización de métodos anticonceptivos y llamó a la población a seguir las reglas de la castidad y la pareja estable.
Cotugno afirma que "con sutiles instrumentos de manipulación intelectual y jurídica" surgen "propuestas legislativas y programas de educación sexual" que forman parte de un "firme proceso de destrucción y tergiversación de los principios y valores básicos de la familia".
A su vez, aclaró que hay "presiones económicas y políticas" para "legalizar modelos aberrrantes de familias", refiriéndose no sólo al proyecto que fija plazo legal a la fidelidad sino también a la unión de personas homosexuales.
De paso, el arzobispo criticó los programas de educación sexual porque imponen políticas anti-natalistas y atacó el aborto, la reproducción asistida y la comercialización de embriones.
