“Estoy harto de esta cuquilandia que pasa por un lado y dice que es un desastre la economía y promete un chorizo”, afirmó el candidato frenteamplista, José Mujica, en el acto de cierre del Espacio 609. Unas 25 mil personas concurrieron a la plaza 1º de mayo.

La murga Queso Magro y Larbanois Carrero abrieron el acto de cierre del Espacio 609 en el que hablaron Lucía Topolansky, Eduardo Bonomi, Ernesto Agazzi, Danilo Astori y José Mujica. “Tremendo”, le dijo Astori a Mujica cuando llegó en referencia al éxito que había tenido la convocatoria del sector.

Todos los oradores hicieron referencia al final de la campaña y con diferentes matices y cada uno a su estilo instaron a los militantes a redoblar esfuerzos para convencer a quienes aún no decidieron a qué partido votar.

La primera en hablar fue la senadora Lucía Topolansky que agradeció “el color” que le dio al acto la organización realizada por jóvenes militantes del Espacio 609. “Porque la política también es alegría”, subrayó.

“Esta lucha vale la pena porque no podemos permitir que el gobierno del Frente quede por el camino”, afirmó y reflexionó sobre el papel de los símbolos en la política, mencionando el hecho de que el acto haya sido enfrente al Palacio Legislativo.

En esa línea, convocó a los frenteamplistas a “sacar sus banderas” y reconoció la valentía de algunos frenteamplistas de pequeñas localidades del interior del país en las que “podés perder el trabajo por poner una bandera”.

“El que no puso la bandera que la ponga, somos muchos porque empezamos a mostrarnos”, agregó y llamó a convencer a quienes no piensan en votar al FA: “Esos orientales son tan orientales como nosotros (…) tenemos que influenciarlos en la alegría”.

Antes de dar lugar al ex ministro de Trabajo, Eduardo Bonomi, Topolansky habló sobre los votantes que vendrán desde Buenos Aires: “A esos compatriotas hay que recibirlos, yo no soy tan optimista como ellos que todos los votos son nuestros, pero si ellos lo dicen…”

Bonomi llevó al estrado un ejemplar de la revista Guambia de 1993 en el que aparecía una caricatura del entonces presidente de la República , Luis Alberto Lacalle, con un serrucho en alusión a los recortes presupuestales de esos años, bajo el título “La poda del Cuqui”. “Dicen que la historia enseña y ahora 16 años después, usa motosierra”, ironizó.

El ex ministro de Trabajo recordó la campaña de 1994 cuando Tabaré Vázquez lanzó su candidatura a la presidencia de la República, señalando que en ese año los opositores al Frente Amplio cuestionaban la figura de Vázquez diciendo que no tenía la altura de Líber Seregni.

“Ahora (Vázquez) ya no compite y todos los palos son contra el Pepe, la derecha siempre juega igual (…) Mujica no es Vázquez, Vázquez no es Mujica, chocolate por la noticia”, agregó.

Para Cerrar, Bonomi habló de las políticas en materia laboral, señalando que para el próximo gobierno el Frente Amplio se comprometió a crear 200 mil puestos de trabajo, de los cuales 40 mil serían destinados a los jóvenes y criticó las políticas de generación de empleo basadas en bajar la calidad del trabajo.

A la hora de dar argumentos para votar al Espacio 609, Bonomi dijo que el sector, siendo mayoría en el Parlamento votó todas las propuestas que llegaron desde el Ejecutivo en función de la gobernabilidad a Vázquez y que era necesario tener amplia representación en Parlamento para darle gobernabilidad a un futuro mandato de José Mujica.

Agazzi debió estirar un poco su discurso porque aún no había llegado Astori, por lo que lo concluyó diciendo: “Y ahora los dejo porque ya llegó Astori”.

El ex ministro de Ganadería hizo fuete hincapié en que los militantes del Espacio 609, no militan por cargos en el Estado y agradeció a la militancia por su “creatividad y energía”.

Por otra parte, Agazzi dijo que en 2004 no existían estadísticas claras sobre la situación del país y destacó el hecho de que en esta campaña se tiene la experiencia de haber estado en el gobierno: “No era cierto que para ser ministro tenías que tener dos apellidos”, agregó.

También resaltó la importancia del programa de gobierno como una construcción colectiva: “Lo que hemos prometido, lo hemos cumplido de punta a punta, ese programa no lo hizo una persona sola”.

Cuando llegó el turno de Danilo Astori, el ex ministro de Economía auguró una victoria del Frente Amplio en primera vuelta, agregando que el Frente Amplio “ no son cinco años de gobierno, sino un proyecto de realización nacional”.

Asimismo, señaló que la gestión del Frente Amplio en el gobierno le da derecho al FA a estar “con la cabeza en los sueños y los pies en la tierra” y agregó: “no es en los discursos sino en los resultados en los que tenemos que seguir siendo de izquierda”.

En esa misma línea calificó al gobierno del FA como ¨”unas carta de presentación fenomenal” y criticó las políticas de flexibilización laboral de Luis Alberto Lacalle: “Es muy fácil crear empleo a costa del salario”.

Astori resaltó entre los logros del gobierno lo hecho en materia de distribución de la riqueza y estabilidad política y definió que el concepto “confianza” es el más representativo de la gestión del Frente Amplio.

En un guiño al sector anfitrión, Astori cerró su discurso con un verso de Mauricio Rosencof: “Redoblando esperanza y coraje, con margaritas de amor y de paz, por lo chiquitos que faltan, por los chiquitos que vienen”.

Lo primero que dijo Mujica fue que no hay ningún director de radio o televisión “que haya recibido una llamada del Pepe para alcahuetearlo “ y agregó que los medios “se llenan la boca con la libertad de prensa y no la practican”.

Tras las críticas a la prensa, Mujica afirmó que el Frente Amplio “no vino para ganar las elecciones sino para cambiar el país y recordó los inicios de la coalición de izquierda y el papel que jugaron en los finales de la década del sesenta y principios de los setenta la unidad entre los obreros y los universitarios, por lo general hijos de la clase media.

Mujica señaló que una de las principales diferencias con la derecha es su concepción del hombre y la confianza que se tiene en su capacidad de construir una realidad diferente, a la vez que calificó como “décadas de parálisis” las gestiones estatales de los años previos a la llegada del Frente Amplio al gobierno.

“Algunos se preocupan porque vivimos en una cueva y no se preocuparon por los capitales públicos”, agregó.

Por otra parte, marcó la eliminación de la indigencia como una prioridad en un futuro gobierno del Frente Amplio, afirmando la necesidad de una economía vigorosa para sustentar la distribución pero alejándose de la concepción ilustrada en “esperar que el vaso se llene para que gotee”, “porque el vaso no se llena nunca”.

“Si la economía se tranca te quedás como un poeta y no resolvés nada”, agregó. Como en anteriores oportunidades, Mujica centró su discurso en la necesidad de universalizar el conocimiento para darle calidad al trabajo de nuestro país, haciendo alusión a una demanda creciente de alimentos en el mundo para los próximos años.

También destacó la importancia de que “la universidad marche hacia el norte”, aclarando que los cambios en la universidad deben hacerse con la universidad, pero no pueden diluirse en un debate: “tenemos que hacerlos ahora”, agregó.

Mujica anotó que existe 0% de desempleo en algunas áreas calificadas mencionando, la veterinaria, la ingeniería en agronomía y forestación y la informática: “No hay otro camino que cultivar talento”, agregó.

“Estoy harto de esta cuquilandia que pasa por un lado y dice que es un desastre la economía, y al rato promete un chorizo”, comentó el candidato frenteamplista agregando que el aumento del salario real es percibido por los uruguayos en sus compras diarias.

Finalmente, Mujica cuestionó el alto índice de indecisos que marcan las encuestas calificando como “una reacción lógica” de los encuestados a la hora de responderle al encuestador: “¿Qué me venís a preguntar?”

El candidato a la presidencia por el Frente Amplio cerró su discurso con una frase del presidente brasileños Luiz inacio Lula Da Silva: “el corazón está a la izquierda”.