Lugano Os ama

La selección uruguaya festejó su coronación en la Copa América en la madrugada del lunes ante un Centenario colmado, tras una larga caravana desde el Aeropuerto por Avenida Italia. Cerró la ceremonia el Loco Abreu y su humor, con apodos hasta ahora desconocidos y comparando a Lugano con Bin Laden. Galería de imágenes.

Fotos:EFE

Los jugadores y el público uruguayo tuvieron su merecido festejo tras la obtención de la Copa América. Pasadas las 23:30 horas estaban saliendo los futbolistas por la Base Aérea Nº1, cuando hacía ya tres horas no menos de 60.000 almas abarrotaban el Estadio Centenario.

La caravana partió por Avenida de las Américas a paso de peatón, con los futbolistas celebrando y exhibiendo ese hermoso trofeo que mantuvo en vilo a tres millones de corazones. Cada una de las personas que salió a saludar el recorrido triunfal de la delegación celeste se llevó un gesto, una foto, o uno de los tantos “Uruguay nomá’” que regalaron los jugadores a su afición.

La espera en el Centenario se hizo larga, lo que hizo que miles de personas se retiraran antes de la llegada del plantel, y recién sobre las 3:08 asomó por el túnel el capitán Diego Lugano con la Copa en sus manos. Explotó el estadio y al grito de “palo, palo bonito” y “ya volvimos otra vez”, arrancaron las celebraciones acompañadas con el bombo que, a diferencia del trofeo, no cambió de manos y estuvo siempre con el Cebolla Cristian Rodríguez.

La celeste dio la vuelta olímpica por el lado de afuera de un campo de juego al que se quiso cuidar, dado que está siendo resembrado, y en cada rincón los futbolistas se detuvieron para ofrecerle al público su más sincero agradecimiento.

La cuenta del 1 al 15 fue una constante, como una parada obligatoria en cada tribuna. Al completar la vuelta, en un estrado ubicado muy cerca de la zona donde habitualmente están los bancos de suplentes, los jugadores entonaron las estrofas del Himno Nacional, interpretado por los músicos de la Fuerza Aérea, y luego hubo tiempo para las locuras de Sebastián Abreu.

El minuano comentó entre risas, fiel a su estilo, que no piensa retirarse de la selección hasta la próxima Copa América, en Brasil 2015, y recién en ese entonces “le dejo mi lugar a Abel Hernández”.

El Loco valoró que “un 16 de julio le ganamos a Argentina recordando en el Maracanazo” y “como en el 87, aquellos jugadores salieron campeones en Argentina y nosotros no podíamos ser menos, así que fuimos y salimos campeones”.

Después hubo tiempo para las menciones especiales y más bromas, como cuando hizo mención al premio Fair Play para la celeste, recibido por su capitán Diego Lugano. Según Abreu, “que le entreguen el Fair Play a Lugano es como que le den el Nobel de la Paz a Bin Laden. Fuimos Fair Play por primera vez en la historia, y acá la rodilla del capitán todavía la tiene Guerrero atrás de la espalda”.

“Tuvimos a la revelación, a la figura más joven: el Seba Coates”, y pidió un “olé, olé, olé, oléee, Patooo, Patoo”. Luego, recordó que tuvimos al mejor jugador del Mundial y ahora al mejor de la Copa América, con Luis ‘Jabalí’ Suárez”.

“Y por último se volvió a cortar el cable, y a mí me dieron el premio al mejor suplente de la Copa América”, bromeó el Loco, quien además dijo compartir “un récord con Godín. Fuimos los únicos dos jugadores de la Copa que entramos y no tocamos la pelota”.

Por último, más serio y como para cerrar la ceremonia cerca de las 3:30 horas del lunes, Diego Lugano dijo que “esta Copa se ha ganado con mucho esfuerzo y sacrificio, soñándola. Este grupo se las dedica a ustedes. Gracias por todo el apoyo y Uruguay nomá’”.

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