Mató de un hachazo a su sobrino

Guichón se vio conmovida este domingo por un incidente familiar que acabó con la vida de un niño y dejó a una mujer severamente herida.

En el vecindario de la zona de 19 de Abril y Sarandí un joven matrimonio dejó a su hijo de 11 años y a su hija de 13 al cuidado de su abuela, informó El Telégrafo de Paysandú.

En el fondo de la casa vive también el hijo de la mujer (tío de los niños), que tiene 19 años. De acuerdo a la información de los vecinos, se trata de un joven de carácter difícil, "con aparentes alteraciones siquiátricas", que se habían acentuado tras la muerte de su padre (el único que podía controlarlo, según vecinos).

El domingo de tarde, el joven atravesó el terreno y se dirigió a la casa de su madre, de 62 años, donde por motivos desconocidos la atacó con un hacha. Según la crónica de El Telégrafo, le cortó una oreja y parte de la cara hasta que el niño de 11 años salió a defenderla. El joven se dio vuelta y atacó entonces a su sobrino con el hacha, causándole graves heridas en la cabeza que le provocarían la muerte camino al hospital.

Luego volvió a atacar a su madre, provocándole más cortes en el rostro, mientras la niña lograba escapar de la casa y refugiarse en la casa de unos vecinos.

Fueron los vecinos los que sorprendieron al joven en el medio del ataque contra su madre, impidiendo de esa forma que le quitara la vida. El homicida se dio a la fuga mientras el niño de 11 años era llevado al hospital.

Pese al esfuerzo conjunto de cinco médicos, el niño no logró sobrevivir a las terribles heridas causadas por el hacha.

El Telégrafo cuenta que el padre de la víctima (hermano del homicida) intentó tirar abajo la puerta del hospital para intentar ver con vida a su hijo pero fue contenido por los profesionales. La mujer está internada en Paysandú en estado muy grave.

La policía detuvo al agresor, al que se describió como "retraído, solitario" y sin amistades. Está a disposición de la Justicia, aunque sus declaraciones han sido incoherentes.