Ludovic Zuili es el protagonista de este clip que no tiene derecho ni revés. El audiovisual fue realizado en las calles de Tokio y el joven caminó por ellas hacia atrás, despertando la efímera curiosidad de algunos transeúntes con los que se cruzaba.
El experimento, parte de un programa de televisión francés, consistió luego en emitir la grabación en reversa, de modo que Zuili era el único que aparecía caminando "al derecho", logrando un efecto de lo más desconcertante.