Contenido creado por Jorge Luis Costigliolo
Internacionales

Es asunto grave

Cristina Fernández protestó porque la denuncian “por decir malas palabras”

“Basta Macri”, dijo la ex presidenta argentina, y Óscar Parrilli acusó al Gobierno de hacer “espionaje político” contra la ex mandataria.

23.01.2017 21:52

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2017-01-23T21:52:00-03:00
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La ex presidenta de Argentina Cristina Fernández (2007-2015) dijo "basta" a su sucesor, Mauricio Macri, para criticar que "ahora" la denuncian "por decir malas palabras" y "no saben que más inventar", luego de que se filtrase una polémica conversación telefónica suya.

"Basta Macri. Ahora me denuncian por decir malas palabras. No saben que más inventar", dijo la ex mandataria en Telegram, junto a una irónica foto en la que se muestra una camiseta con su cara y un teléfono al oído, acompañada de la frase "soy yo, Cristina, ¡pelotudo!", que ella dice en el audio divulgado, una charla con el ex jefe de la Agencia Federal de Inteligencia de Argentina (AFI) Óscar Parrilli (2014-2015).

Además, en un comunicado, este último aseguró que la expresidenta sufre "espionaje político" por "expresas directivas" de Macri.

Divulgada por radio La Red, la conversación telefónica versa sobre las causas abiertas contra el polémico ex espía Jaime Stiuso, que desembocó en que el fiscal Guillermo Marijuán haya pedido investigar si la ex presidenta incurrió en un "abuso de autoridad".

La charla comienza cuando Parrilli contesta a un "hola" de la ex jefa de Estado y ella le responde: "Yo, Cristina, ¡pelotudo!", una frase que se ha hecho muy popular en las últimas horas.

"Empezá a buscar todas las causas que le armamos, no que le armamos, que le denunciamos", le pide Fernández, retractándose en su primera expresión, a Parrilli, según el audio, registrado el 11 de julio de 2016, día en que el diario La Nación publicó una entrevista con el exjefe de Operaciones de Inteligencia Antonio 'Jaime' Stiuso.

En esa publicación, el ex espía dijo que Fernández -a quien llama "mujer loca"- y su esposo, el fallecido ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007) "no utilizaban la Secretaría de Inteligencia del Estado porque tenían sus servicios paralelos, con gente que investigaba para ellos y les armaba sus propios carpetazos (judiciales)".

"Por eso te estoy llamando, porque a ese chico hay que matarlo. Es un caradura. (...) "¿Cómo que los Kirchner tenían servicios paralelos? ¿Y él nunca lo denunció eso? (...) ¿A quién le armamos carpetazo nosotros?", critica la exmandataria en la conversación.

Ante esto, el ex jefe de la AFI, muy crítico con la gestión macrista, dijo en su comunicado que se está asistiendo "a una suerte de WATERGATE (sic) autóctono, con la activa participación de ex agentes de Inteligencia y la complicidad de jueces federales, que utilizan causas judiciales truchas (falsas) o pre-causas para justificar intervenciones telefónicas de dirigentes opositores".

Asegura que la divulgación a la prensa "de manera ilegal" de esas conversaciones es "responsabilidad exclusiva de quienes tienen el deber de su custodia", y anunció que tomará acciones legales contra el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, el actual titular de la AFI, Alberto Arribas, el juez Ariel Lijo y el fiscal Marijuan.

Marijuán, en su dictamen presentado ante Lijo (y reproducido por la agencia estatal Télam), señaló que "la afirmación -aún con la retractación- de que se habrían armado causas penales" contra Stiuso "necesariamente conduce" a la Fiscalía "a solicitar" que se investigue como abuso de autoridad.

El hallazgo de la charla telefónica surgió de una causa a cargo de Lijo en la que Parrilli está siendo investigado por el supuesto encubrimiento del empresario Ibar Pérez Corradi, acusado de ser el autor intelectual de un triple crimen e investigado por tráfico de efedrina.

Stiuso, apartado de su cargo en 2014, colaboraba con el procurador especial de la causa por el atentado contra la mutua judía AMIA de Buenos Aires en 1994 -que dejó 85 víctimas mortales-, el fallecido fiscal Alberto Nisman, cuya muerte, en enero de 2015, aún no ha sido esclarecida.

Nisman murió cuatro días después de denunciar a Fernández por el supuesto encubrimiento, a través de un memorándum firmado con Irán, de los iraníes sospechosos del ataque, a cambio, presuntamente, de favorecer el comercio con el país persa, algo que la expresidenta siempre ha negado.

En 2015, Stiuso, cuyo testimonio era reclamado por la Justicia en la causa que investiga la muerte del fiscal, retornó al país tras casi un año de paradero desconocido.

Stiuso había dicho que a Nisman lo asesinaron porque "tenía escuchas en las que involucraba al Gobierno" de Fernández y declaró ante la Justicia que al fiscal "lo mató un grupo relacionado" con ese Ejecutivo por la denuncia que el fiscal había interpuesto contra la expresidenta.

(Fuente: EFE)