Contenido creado por Martín Otheguy
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No den ideas

"¿Por qué hay un registro de fumadores de cannabis y no uno de consumidores de alcohol?"

El antropólogo Daniel Vidart considera que la ley de la marihuana "la estigmatiza más que lo que la legaliza".

31.05.2017 11:39

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2017-05-31T11:39:00-03:00
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Con el título "Uruguay, el primer país donde podés fumar cannabis donde quieras", el diario The Guardian realizó un informe sobre la ley de regulación de marihuana en nuestro país, con énfasis especial en la venta en farmacias que comenzará en el mes de julio. De esta forma, Uruguay "será el primer país en vender droga en un mostrador".

El artículo narra los comienzos del debate de la regulación y el caso de Alicia Castilla, la escritora argentina encarcelada por tener plantas de marihuana en su casa. Luego consulta a varias personalidades vinculadas al tema en el país, como Eduardo Blasina, director del Museo del Cannabis, la propia Castilla, el antropólogo Daniel Vidart, activistas y responsables de clubes de cannabis.

Las principales críticas de los entrevistados al sistema actual es la necesidad de registrarse en el Estado para comprar la marihuana.

De acuerdo al reporte, solo siete miembros del gobierno tendrán acceso completo al registro y tres de ellos deberán estar presentes al mismo tiempo en caso de que se necesite obtener algún nombre. Se tomaron precauciones importantes para que el registro "no caiga en manos equivocadas" por cuestiones de privacidad.

Vidart discrepa con este registro, ideado durante el gobierno de su "amigo personal" José Mujica. "Es como un registro policial que están construyendo de plantadores y consumidores", dijo.

"La ley estigmatiza más a la marihuana de lo que la legaliza", agrega. "¿Por qué debe haber un registro de fumadores de cannabis y no uno de consumidores de alcohol? El alcohol es una droga más mortífera. Esta ley continúa considerando que los fumadores son tan peligrosos que necesitan ser registrados por el gobierno. Y el registro es más o menos seguro mientras tengas un gobierno democrático, pero puede convertirse en un arma contra los consumidores si el clima político cambia", dijo.

Hasta ahora, 3.500 personas se inscribieron en el registro, que se suman a los 6.700 anotados como plantadores y los 57 clubes de cannabis abiertos.