Vázquez regresó al país, tras 13 días de gira

El presidente Tabaré Vázquez llegó este domingo a Montevideo, junto con la delegación oficial que lo acompañó en su gira por Alemania, Finlandia y Rusia.

Vázquez fue acompañado por empresarios y trabajadores que ayudaron a fortalecer la presentación de nuestro país y sus posiblidades de invertir o concretar negocios.

Durante la gira, Vázquez fue recibido por la canciller Ángela Merkel, con quien habló sobre la necesidad de mantener el compromiso de fortalecer vínculos comerciales entre Europa y Latinoamérica ante un eventual retroceso de la liberación de la economía y concretamente de seguir avanzando en el Tratado de Libre Comercio entre Europa y el Mercosur.

La delegación permaneció cinco días en Alemania, en donde se realizaron varias presentaciones del país ante empresarios y posibles inversores, además de participar de otros eventos comerciales en Hamburgo y Berlín.

En Finlandia, a donde el presidente llegó el domingo 12 de febrero, el presidente Vázquez se reunió con su par Sauli Niinistö con quien trabajó sobre las posibilidades de generar acuerdo de infraestructura y las condiciones en las que se enmarca el proyecto de una segunda planta de la empresa UPM.

Los ministros mantuvieron encuentros vinculados a infraestructura portuaria, transporte y forestación y el presidente aprovechó para presentar las políticas del país en su lucha contra el tabaco.

En Rusia, la delegación oficial mantuvo un encuentro con uruguayos descendientes de los inmigrantes rusos de principios del siglo XX, quienes se radicaron en la tierra de sus abuelos en busca de mejores oportunidades. Vázquez se comprometió a regresar al país, durante el mundial del fútbol e invitó a su par Vladimir Putin a conocer San Javier, la colonia rusa más grande de todo el hemisferio sur.

La nota de ese encuentro, la dio el presidente anfitrión que fiel a su costumbre hizo esperar por más de dos horas al invitado. Según cronistas que estuvieron en el lugar, el presidente Vázquez regresó al hotel y retrucó la espera llegando con cinco minutos tarde a la sede del gobierno ruso.