Contenido creado por Martín Otheguy
Locales

Gatillo fácil

Cazadores furtivos dispararon a guardaparques de área protegida

Cazadores furtivos amenazaron y dispararon al guardaparques del área protegida de San Miguel, el episodio más grave de un problema que crece: la caza impune en zonas protegidas del país. El trabajador no fue herido.

28.04.2016 14:05

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2016-04-28T14:05:00-03:00
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La caza furtiva en el país es un problema desde hace mucho tiempo. Los cazadores ingresan a áreas protegidas, en las que habitan especies autóctonas muchas veces amenazadas, y aprovechan la falta de personal de seguridad para entrar en el territorio y cazar.

Como suelen entrar con perros, el daño causado afecta no sólo a los animales que van a buscar sino también a otros en situación muy sensible, además de depredar flora nativa.

Colabora en esta situación la soledad de los guardaparques, que trabajan en forma individual en las áreas protegidas y no están autorizados a repeler con armas la acción de los cazadores, pese a que parte importante de su trabajo es custodiar el terreno.

En general, los encuentros entre los guardaparques y los cazadores quedan en advertencias verbales por parte de los trabajadores y el pedido de que se retiren del lugar, pero este pasado domingo se produjo un incidente más grave, que motivó una denuncia policial.

En el área protegida del Parque Nacional San Miguel, cazadores furtivos amenazaron y dispararon con armas de fuego hacia la casa del guardaparques. Según narró Francesco Lavecchia, guardaparques que trabaja en las áreas protegidas Potrerillo de Santa Teresa y San Miguel, y que realizó la denuncia ante la policía, el guardaparques de San Miguel "corrió" el fin de semana una gente que estaba en un par de botes cazando, acampados enfrente del área protegida.

Al día siguiente el guardaparques de San Miguel los vio nuevamente circulando en el arroyo San Miguel y les advirtió que se retiraran. Los cazadores lo insultaron, lo amenazaron y efectuaron disparos en dirección a su casa.

Lavecchia explicó que como el arroyo San Miguel es el límite del área protegida, por lo que los cazadores aprovechan para desembarcar en cualquier zona, generalmente de noche, y entran a cazar (principalmente carpinchos).

Además, tienen una operativa muy organizada. Antes de llegar al puente que une Chuy con la localidad de 18 de Julio, se bajan y colocan los carpinchos, las armas, y el resto del material en un lugar escondido, a fin de que si los detienen no encuentren nada. Mientras tanto, dos personas ubicadas cerca del puente y que simulan pescar hacen de campanas para avisar si hay alguna clase de patrullaje. Más tarde, recogen las piezas de caza y las armas.

Denuncia

Se hizo la denuncia en la comisaría de 18 de Julio y la policía concurrió a la casa del trabajador. Sin embargo, lo que los guardaparques exigen es que los operativos estén mejor organizados y se detenga a las personas en los botes, al menos para que quede un registro de quien está ingresando a la zona.

Según Lavecchia, la caza furtiva está extendida en todas las áreas protegidas del país y los guardaparques se deben enfrentar con frecuencia a situaciones de inseguridad.

Esta es una problemática que no está contemplada en el régimen laboral de los guardaparques, la que se podría minimizar si hay al menos dos guardaparques por zona al mismo tiempo. "No se debería trabajar de a uno en situaciones así", explicó Lavecchia. Otra de las inquietudes es tener también algún tipo de cobertura.  "Si a mí me pasa un accidente con cazadores o cualquier otra clase de accidente, nadie cubre lo que pasa conmigo o con mi familia. Tenemos que tener un respaldo", explicó.

Los fondos para los programas que proveen de guardaparques a las áreas protegidas del SNAP dependen del Ministerio de Medio Ambiente.

Los trabajadores se encargan en forma solitaria de custodiar extensiones que, en el caso de San Miguel, por ejemplo, cubren 1.500 hectáreas. Por lo general hay un guardaparque por turno.

En el país hay 13 áreas que dependen del Sistema de Áreas Protegidas (SNAP). En total hay unos 36 guardaparques cumpliendo funciones (contando estas áreas y también zonas privadas).