Contenido creado por Laura Meléndez
Salud

Si maneja beba

Falta de hidratación es tan peligrosa al volante como el alcohol

Un estudio publicado en la revista Physiology and Behavior indica que la deshidratación podría provocar los mismos síntomas que consumir alcohol si vamos a conducir un vehículo.

26.04.2015 10:06

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2015-04-26T10:06:00-03:00
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Según un reciente trabajo a cargo de la Universidad de Loughborough, los conductores llegan a tener el doble de errores al volante si sufren una leve deshidratación. Aquellos que tan solo podían beber 25 ml de agua en una hora duplicaban sus errores, de forma muy similar a lo que ocurriría al haber consumido alcohol al volante, consigna Medciencia.

Ron Maughan, profesor de Deporte y Nutrición, y director del estudio asegura que suele deplorarse el consumo de alcohol al volante, "pero no solemos pensar en los efectos de otros factores que afectan nuestra habilidad de conducción, como no beber suficiente agua y acabar en deshidratación. No hay duda de que conducir en estado de embriaguez o bajo los efectos de las drogas aumenta el riesgo de sufrir accidentes, pero nuestros hallazgos destacan un peligro poco conocido y sugieren que los conductores deben ser alentados para asegurar una buena hidratación".

El nivel de errores cometidos con deshidratación leve equivale a los cometidos por alguien con un 0,08% de alcohol en sangre, el límite legal de Reino Unido.

Por otra parte, la deshidración también provoca cambios y mal funcionamiento mental, cambios de humor, mala concentración, disminución del estado de alerta, alteración de la memoria a corto plazo, además de fallos en la conducción, como demuestra el estudio.

Durante dos días se realizaron pruebas en conductores masculinos utilizando un simulador de laboratorio. Cada voluntario visitó el laboratorio hasta en tres ocasiones, usando el simulador hidratado o con una leve deshidratación. Dicha conducción simulada incluía una parte de dos horas monótonas continuas en una carretera de doble calzada, con curvas, y una simulación auditiva de bandas sonoras y vehículos en movimiento lentos para ser adelantados.

Uno de los días, los participantes consumieron una media de 200 ml de líquido cada hora, y en otro día, solo 25 ml por hora. Se tuvieron en cuenta errores, como fallos en el carril, mal frenado o tocar o cruzar las líneas del carril cuando no debían.

La deshidratación duplica los errores

Según los resultados, durante el día de buena hidratación los conductores cometieron una media de 47 incidentes de conducción, mientras que el día de deshidratación ese número se elevó hasta 101. Incluso en el período de dos horas de monotonía, la tasa de errores también aumentaba, sobre todo al final de la prueba.
"Los resultados de este estudio sugieren que una deshidratación leve provocaba un aumento significativo de errores de conducción menores durante una conducción prolongada, en comparación con el mismo tipo de conducción llevada a cabo con una correcta hidratación. El nivel de deshidratación inducido en el estudio fue leve, y podría ser fácilmente reproducido por personas con acceso limitado a líquidos en el transcurso de un día ajetreado de trabajo".

Para finalizar, los investigadores recuerdan que los errores de los conductores representan hasta el 68% de los accidentes, al menos en Reino Unido (donde se realizó el estudio), por lo que una deshidratación leve podría producir cambios negativos en el estado del animo, reducir la concentración y modificar el estado de alerta o la memoria a corto plazo, además de ocasionar dolor de cabeza y fatiga.