DT del Rocha procesado sin prisión

"Me mordió un dedo, tengo la marca todavía. Por eso hubo un forcejeo, nos caímos sobre la tribuna y él llevó la peor parte", explicó Bitabares al programa Las Voces del Fútbol, de la 1410 AM, y sostuvo que el comienzo del inconveniente posterior a un amistoso con la selección de Maldonado fue porque no quiso darle una nota al periodista y éste lo siguió.

“Igualmente puedo entrenar al plantel y dirigir amistosos en los que no se cobre entrada. Estoy analizando la posibilidad de pagar esa sanción de alguna otra manera, como con trabajos comunitarios. De no podes tendré que rescindir el contrato con el club y afrontar la demanda civil”, agregó.

“Yo soy manso, pero siempre hay una gota que derrama un vaso”, dijo Bitabares, quien dijo tener “28 años como funcionario policial y un legajo limpio”. “No justifico lo que pasó, pero pueden llamar gente acá y les dirán que nunca viví un incidente de violencia. Acá es pueblo chico e infierno grande. Hay chacras que hay que cuidar”, sostuvo el entrenador, molesto por algunas críticas del periodista que pasaron al plano personal.

“Para que este club siga existiendo, el profe y yo estuvimos trabajando un año gratis. Eso a algunos acá les molesta. Lo hice con terrible falta de ética profesional pero para ayudar al club. Colaboraron Defensor Sporting y Sud América prestándonos jugadores. Acomodamos la casa y a algunos les molestó”, dijo Bitabares, y aseguró que el periodista Gustavo Rodríguez responde a los intereses de la directiva anterior a la actual en Rocha.

”Me dio un trompazo con la luz apagada”

“Él entendió que le estoy haciendo una cama para sacarlo del club. Yo le dije que no me gritara porque no era el lugar, y que saliéramos afuera para hablar. Ahí subió a la tribuna y en ese momento empezó a insultarme y a decirme que soy mala leche. Cuando se apagó la luz del estadio recibí un golpe que me dejó entre los bancos de la tribuna. Tengo de testigo al técnico de la selección de Maldonado”, explicó el periodista Gustavo Rodríguez.

“En un momento aparecieron tres personas que en la oscuridad del estadio me lo sacaron de arriba. Ahí me di cuenta que sangraba y que había perdido un diente, mientras me gritaba que me iba a matar. Lo único que le dije fue que nos íbamos a ver en la justicia. Ahora voy por lo civil porque esto me perjudica para trabajar en televisión y también en radio, por la falta de un diente”, indicó.

“Acá se quiere embarrar la cancha y el periodista siempre es el malo. ¿Cómo va a decir que me negó una nota si hace cinco años que no hablo con él? Me pegó y no lo mordí. ¿Para qué lo voy a morder? Si lo quiero agredir le doy un trompazo. Él cambió su declaración, seguramente asesorado por su abogado. Miente y dice que me empujó, pero si me empujan caigo de espalda, no con la cara en el cemento”, indicó.

“El Rocha FC no ha mandado un comunicado repudiando el hecho ni diciendo qué pasará con el técnico. Acá hay casos que periodistas se tienen que callar la boca por un aviso. Yo no soy así. Prefiero trabajar gratis y no venderme al bajo precio de la necesidad”, dijo, y luego recordó que el hijo de Bitabares es dirigente del club.