Contenido creado por Gerardo Carrasco
Curiosidades

Sale un petrodólar

Ser mendigo profesional en Dubái: una actividad que puede redituar más de US$ 70.000 al mes

Las autoridades luchan contra estos pordioseros, que suelen ser extranjeros llegados al país con visa de turista.

11.01.2018 13:15

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2018-01-11T13:15:00-03:00
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Montevideo Portal

En todo el mundo existen leyendas urbanas acerca de mendigos que son en realidad millonarios, y que al final de cada jornada mendicante recogen sus harapos y regresan a sus mansiones. Esta leyenda tiene sus visos de realidad en Dubái, donde los pordioseros no son ricos, sino que se hacen.

La mendicidad en ese rico país asiático es tan lucrativa que muchas personas tramitan visas turísticas de tres meses y viajan a ese país con el exclusivo cometido de pedir en las calles. Y si bien puede sonar exagerado, se ha constatado que los más astutos de esta profesión pueden recaudar 270.000 dírhams en un mes, cifra que al cambio actual equivaldría a unos 73.500 dólares.

Los reportes acerca de mendigos profesionales que se aprovechan de la credulidad de los ricachones de Dubái han circulado en las redes desde hace varios años, y pese a los esfuerzos de la policía local al respecto, se lo considera u problema generalizado. Además, las crónicas acerca de migrantes que llegan a "Las Vegas de Medio Oriente" y obtienen grandes cantidades mendigando, alientan a otros a seguir su ejemplo.

Como era de esperar, semejante fuente de dinero no tardó en atraer -o crear- redes de crimen organizado, y se ha reportado la presencia de bandas árabes o de otros países de Asia, que traen al país mendigos de forma ilegal y se quedan con la mayor parte de sus ganancias.

La mendicidad en términos generales es ilegal en Dubái, pero a estos mendigos se los llama profesionales por buenas razones, y una de ellas es su habilidad para eludir a las autoridades.

En cuanto a su modus operandi, apuntan a personas de apariencia pudiente y les sueltan una historia desgarradora que tienen bien ensayada. Por lo general dicen tener a toda una gran familia durmiendo en la calle o viviendo en una región devastada por la guerra, e insisten en que necesitan ayuda con urgencia.

Pero lo que realmente diferencia a estos mendigos de los pedigüeños del montón es que no se conforman con moneditas. En sus dolientes discursos piden cantidades que a menudo superan los 1.000 dírhams, y hay personas que, conmovidas, se los dan.

"Convencen a la gente con sus historias y se ganan su simpatía. Solía dar dinero a estas personas hasta que me di cuenta de que esto se había convertido en un fenómeno, entonces dejé de creer sus cuentos", relataba Nawal Al Naqbi, un ciudadano de Dubái, en declaraciones al periódico The Khaleej Times.

Las autoridades locales lanzan cada año campañas contra estos pordioseros astutos, especialmente luego de que descubrieron las grandes sumas que obtienen. En 2016, la policía atrapó a un mendigo que ganaba más de 270.000 dírhams por mes. Al igual que la mayoría de sus colegas, era un "turista" con visa válida por tres meses.

"Según nuestros cálculos, los mendigos ganan un promedio de casi 9.000 dírhams al día, pero probablemente recauden más los viernes, especialmente si piden frente a las mezquitas", explicó Faisal Al Badiawi, Jefe de la Sección de Mercados de la municipalidad en declaraciones al citado medio.

"Algunos de los mendigos poseían visas de negocios o de turistas. Comprobamos que la mayoría de los mendigos ingresaron legalmente al país con una visa de tres meses, con el fin de recaudar la mayor cantidad de dinero posible durante su estadía aquí ", agregó Al Badiawi.

2017 fue un año especialmente bueno para los mendigos profesionales que operan en Dubái, ya que el presidente Sheikh Khalifa bin Zayed Al Nahyan lo declaró el Año de la Donación. Las autoridades lanzaron una serie de iniciativas para ayudar a los menos afortunados tanto en los Emiratos Árabes como en el extranjero, pero los mendigos y las bandas delictivas involucradas en la práctica lo vieron como una oportunidad para ayudarse a sí mismos.

65 mendigos profesionales fueron arrestados dentro de los primeros días de Ramadán el año pasado, junto con delincuentes que formaban parte de los grupos organizados que operan tras bambalinas. La policía también apeló al público, pidiendo que no dieran dinero a los mendigos y habilitando una línea telefónica de denuncia. Sin embargo, muchos de estos pedigüeños lograron evitar la captura. En ese sentido, uno de los mayores desafíos que enfrenta la policía es identificarlos.

"Hemos aumentado las patrullas en varias partes del emirato para arrestar a los mendigos, pero el problema es la dificultad para reconocerlos. A diferencia de lo que ocurría hasta hace un tiempo, ahora es muy difícil identificarlos, ya que también parecen bien vestidos e inteligentes ", dijo un alto oficial de policía el año pasado.

Quienes sean atrapados mendigando en Dubái u otras ciudades de los EAU corren el riesgo de ser encarcelados y deportados, pero la posibilidad de ganar una pequeña fortuna prácticamente de la noche a la mañana parece ejercer en algos una atracción muy difícil de resistir.

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