Contenido creado por Martín Otheguy
Locales

Juramento de hipócrita

Suspenden seis años a médico por abusar sexualmente de paciente durante una consulta

El Tribunal de Ética Médica suspendió al médico paquistaní, que registraba un antecedente similar, mientras el caso sigue curso en la Justicia.

17.07.2018 10:49

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2018-07-17T10:49:00-03:00
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Un médico paquistaní radicado en Uruguay fue suspendido por el Tribunal de Ética Médica (TEM) por un plazo de seis años a raíz de un caso de abuso sexual a una paciente, según informó el diario El País y confirmó Montevideo Portal con el documento del caso.

Según se narra en la resolución del TEM, la paciente A.A realizó una denuncia contra el doctor (S.W.) luego de un incidente registrado el 21 de julio de 2016, cuando llamara a la emergencia médica con motivo de un malestar estomacal.

El doctor le preguntó si tenía alguna enfermedad, a lo que la mujer respondió que tenía quistes en los ovarios. Debido a ello, le solicitó que se quitara el pantalón y la ropa interior y le realizó un tacto vaginal.

Asimismo le indicó que iba a proceder a realizarle un tacto anal, a lo cual la paciente se negó. Seguidamente, le manifestó que debía revisar sus ganglios, comenzando a palpar sus ganglios del cuello, tras lo cual "le palpó las mamas, tocándole largamente los pezones".

La mujer le dijo que no tenía dolor en esa zona y le reiteró que la consulta era por un malestar estomacal, pidiéndole que finalizara el examen. Antes de retirarse, el doctor le solicitó que se acostara boca abajo, colocándose un almohadón en el abdomen. Tras hacerlo, asegura la mujer, sintió que el denunciado se colocó encima, apoyando sus genitales sobre ella. En ese momento le solicitó que se retirara de su casa. Todo esto ocurrió mientras en la misma habitación dormía la hija de tres años de la paciente.

Palabra de médico

El médico se presentó ante el tribunal el 16 de agosto de 2017 y contó que ingresó al domicilio, que un señor lo acompañó hasta el dormitorio de la paciente y se retiró, permaneciendo abierta la puerta. Expresó en su escrito que la paciente se presentó con estrés en tratamiento y también contaba con estrés laboral, por lo que le recomendó que consultara con un médico psiquiatra. Ahí refirió que consultaba por dolor abdominal.

Contó que le realizó el examen habitual abdominal indicado para este tipo de patologías, que la paciente firmó la historia clínica y dio por terminada la consulta.

Al día siguiente fue citado de la Seccional 25ª. para declarar sobre una denuncia de una paciente. Indicó que fue "absuelto por el juez, por no existir elementos de convicción suficiente para que se le imputara un delito".

Sin embargo, la empresa de emergencias móviles lo cesó al otro día de la denuncia presentada, luego de haber sido citado para aclarar la situación ante la Dirección Técnica.

El médico sostuvo que a raíz de la denuncia se ha visto perjudicado a nivel laboral, personal y moral, quedando expuesta su persona "sin prueba alguna de los hechos relatados por la denunciante".

Ante las declaraciones contradictorias de médico y paciente, el Tribunal de Ética Médica trató el caso para establecer si el doctor incurrió en falta ética de acuerdo a los hechos denunciados. Para ello se accedió al historial clínico de la mujer y se tomaron declaraciones a las partes involucradas y otros testigos.

Las declaraciones de la mujer

Para arribar a este fallo unánime, el Tribunal valoró "en forma exhaustiva, crítica y armónica el conjunto de los medios probatorios de que pudo disponer"

El relato de la denunciante "es claro, preciso y contundente". La mujer consideró que hasta el tacto vaginal y la revisación de los ganglios en las axilas el examen le había parecido normal según el proceder de un médico.
"El tema fue que él empezó a tocar los pezones de una forma que yo no había pasado en mi vida, que un ginecólogo, que un doctor me haga eso", contó. 

Agregó que se puso nerviosa e incómoda con la situación y por eso firmó el acta para que se retirara, y que luego el doctor le dio unas recetas para su mal de estómago.

Pero cuando el médico se disponía a retirarse le dijo que debía fijarse si todo esto (lo de los quistes) no podía repercutir en la parte de los riñones. Allí es cuando le pide que se ponga boca abajo, con las rodillas en el colchón, y nota que el hombre se sube a la cama y apoya su miembro. "Cuando pasa esto, yo le digo, esto no está bien. Esto no es correcto (...) yo agarro el teléfono que tenía en la mesa de luz y le digo, yo voy a llamar al esposo de mi madre para que te acompañe". Cuando toma el teléfono, el médico se baja de la cama.

Además, explicó que la tomó de las caderas de una forma que no era natural, aclarándole que era por su bien, y le forzó el cuerpo "hacia atrás" hasta hacer contacto.

La denunciante "brindó un testimonio claro, respondiendo espontáneamente a las preguntas y con una ostensible carga de angustia", pese a lo cual hizo "una declaración coherente, verosímil y completamente convincente".

La misma percepción tuvo el médico que le brindó asistencia a la denunciante en forma inmediata posterior al doctor paquistaní, y que la encontró llorando cuando fue a atenderla. A este doctor le llegó la versión de que la denuncia penal había sido desestimada.

Sin embargo, el juez, al contrario de disponer el archivo o la absolución, como sostiene el denunciado, dispuso que le elevaran los antecedentes. Desde entonces sí han existido actuaciones judiciales, desconociendo el Tribunal en qué etapa se encuentran.

De la investigación surge que el doctor paquistaní había recibido una denuncia previa por una situación similar. Le preguntó a otra paciente si se hacía habitualmente chequeos ginecológicos y le ofreció hacer uno, pese a que la consulta versaba sobre otra cosa. "Él insistió varias veces con hacerlo", dijo al TEM la paciente de ese caso anterior . Además, al palparle los senos lo hizo de manera poco profesional (muy distinto a otros chequeos), calificando de "manoseo" el examen de mamas.

Resultan "evidentes las similitudes en los relatos de la denunciante y la testigo", consideró el Tribunal, como por ejemplo el intento de realizar un examen ginecológico cuando la situación no lo ameritaba y las expresiones verbales usadas ("es por tu bien").

Hay que acotar que si bien ambas pacientes trabajan en la misma empresa, no se conocen, ya que se trata de una compañía con más de 650 personas y ambas cumplen tareas en distintos lugares. La psicóloga que atendió a ambos no puso en duda sus relatos.

El doctor ya había sido advertido por la empresa por su conducta sospechosa en el caso de esta anterior paciente, desvinculándolo al registrarse el segundo caso.

Resolución

Los elementos "son unívocos y contestes en su conjunto para determinar la responsabilidad del denunciado", indica el TEM. A la "prueba sustancial" de la declaración "se vio fortalecida por toda la prueba que se produjo en el proceso, la declaración de terceros que apreciaron su grado de afectación, la credibilidad de su testimonio para estos, la inexistencia de animosidad contra el denunciado, el hecho de que el denunciado había tenido una conducta de similares características días antes con otra paciente y la existencia de un patrón común en la forma de abusar de ambas mujeres".

El médico argumentó que los dos testimonios tenían un interés en obtener un lucro económico pero "no existe ninguna prueba que avale sus dichos", y una de las dos personas afectadas ni siquiera inició acciones judiciales.

Todo ello permite al tribunal concluir que el doctor acusado "faltó muy gravemente a la ética profesional en oportunidad de asistir a la denunciante".

"El denunciado vulneró la confianza de la paciente y el Juramento Hipocrático. Utilizando su condición de médico y en el contexto privado en que desarrolló su conducta, abusó de la paciente realizando actos ultrajantes y vejatorios. Se amparó en su posición de médico y en la asimetría de la relación clínica, acentuada en este caso por razones de género y la vulnerabilidad de la paciente, constituyendo todo ello un grave apartamiento de la ética profesional", indica el fallo.