Contenido creado por Inés Nogueiras
Las 40

Costumbres argentinas

Héctor 'Bambino' Veira cantó Las 40

"Jugar en el Centenario era muy difícil. Eran equipos de hombres, durísimos, era bravo ganar en Uruguay"

02.07.2013

Lectura: 17'

2013-07-02T00:00:00-03:00
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Por GERARDO TAGLIAFERRO

Las anécdotas del "Bambino" Veira son un clásico de los programas argentinos de fútbol o de cualquier otro que necesite una dosis probada de diversión. Ahora tiene su propio espacio: junto con el ex representante de Diego Maradona, Guillermo Cóppola, el ex entrenador de la selección argentino, "Coco" Basile y el cantante "Cacho" Castaña conduce "Buenos muchachos" en una señal de cable porteña, aunque de muchachos a todos ellos les queda apenas el recuerdo.

En Uruguay, quien sea aficionado al fútbol y tenga los años suficientes puede reconocerlo -remontándose 40 años- como un futbolista elegante, de aquellos "10" argentinos zurdos, que se distinguían por el delicado trato que brindaban a la pelota incluso en épocas en que, si hablamos de duelos rioplatenses, los partidos, de elegante, tenían poco. Más acá en el tiempo, podemos encontrar postales del Bambino como director técnico del River Plate campeón de América y del mundo en 1986, y tenerlo presente sobre todo porque el gol que posibilitó este último título fue logrado por el uruguayo Antonio Alzamendi.

Y si nos acercamos todavía un poco más, ya lo tenemos en su versión última: como un personaje de los medios argentinos, simpático, locuaz, siempre presto a la frase ocurrente, portador de un repertorio de mil anécdotas y de una envidiable capacidad para narrarlas sin desvencijarlas.

Pero la historia del Bambino Veira contiene páginas menos vistosas. El 4 de abril de 1988 fue procesado por la violación de un menor, ocurrida meses antes, en un sórdido episodio nunca del todo aclarado y del que siempre se manifestó inocente. La justicia sin embargo lo halló culpable en una causa que se ventiló durante casi una década y que terminó incluso obligándolo a un resarcimiento económico al joven, que años más tarde tuvo su bizarro cuarto de hora al asumirse como travesti. El Bambino pasó 11 meses en la cárcel y cuando salió, la mayor parte de los medios y de la sociedad argentina lo acogió como víctima y no como victimario, o a lo sumo le otorgó el beneficio de la duda y le permitió una reinserción sin mayores dificultades, a tal punto que poco después volvió a consagrarse campeón como entrenador, esta vez con San Lorenzo de Almagro, el equipo del que es hincha el Papa Francisco.

Veira tiene hoy, entre otros "rebusques", un espacio en Radio 9, una emisora deportiva cuyos estudios están en el barrio porteño de Colegiales. Allí tuvo lugar este encuentro con un hombre que no abandona su estampa de dandy ni su temerario teñido caoba, pero que se revela a los 66 años como un católico fervoroso cuyas noches no están acompañadas de excesos, como en tiempos bastante más vertiginosos, sino de algunos salmos de la mismísima Santa Biblia.

"Vino el presidente del fútbol amateur de San Lorenzo y le dijo a mi madre: ‘Si el nene firma, mañana traigo la heladera'"


1) ¿De dónde viene el apodo "Bambino"?
Nosotros (el equipo de San Lorenzo) fuimos de gira por Europa y yo era el más joven de todos. Tenía 16 o 17 años, y allá había un jugador que era el "Bambino" Rivera, un jugador internacional, extraordinario. Jugamos un partido en Roma y yo anduve bien, entonces el periodismo me puso "Bambino". Y me quedó. Y "Coco" Rossi, un jugador argentino excepcional, me empezó a llamar así acá en la Argentina.

2) Formaste parte de un equipo al que llamaban "los carasucias" porque la mayoría eran muy jovencitos.
Yo formé parte de dos equipos recordados: "los carasucias" y "los matadores", en el lapso más o menos de diez años. Los "carasucias" éramos unos jóvenes surgidos de las inferiores, nos decían así porque éramos muy chicos. En cambio, cuando vinieron "los matadores" ya el equipo se hizo mucho más hombre. Habían pasado como cinco años y entonces el equipo se hizo mucho más maduro.

3) Para quienes no lo vieron jugar, y sobre todo en Uruguay, ¿cómo era el Bambino jugador?
Yo era parecido al "Beto" Alonso, el jugador de River. Tenía dos cosas: fantasía y gol. Era igual que el Beto, llevaba el gol en el alma pero a su vez jugaba bien, era un "enganche". Más acá en el tiempo, del estilo de Ruben Paz también, que también tenía fantasía y gol. Yo era más o menos parecido a él.

4) En la presentación de la biografía que hace unos años se escribió de vos, el periodista Fernando Niembro dijo que fuiste como Maradona pero sin representante. Es decir, sin alguien que potenciara tu carrera.
Sí, pero además no era un gran profesional. Yo jugaba bien, pero no me cuidaba para jugar mejor. Antes era un poco todo más lírico, pero si yo me hubiese preparado creo que habría rendido mucho más. Tenía unas condiciones técnicas muy buenas pero la verdad no me cuidaba físicamente y entonces no podía responder a las expectativas físicas. Debuté muy joven en primera, tenía 16 o 17 y no estaba bien preparado.

5) ¿Qué quiere decir que no te cuidabas físicamente?
Y, salía mucho, la verdad es que no era un gran profesional. El profesional se tiene que cuidar al fútbol.

6) ¿Tomabas?
No, por suerte no fumaba ni tomaba pero hacía lo peor para un deportista que era trasnochar. Yo trasnochaba mucho. Siempre digo lo mismo: me arrepiento de haber hecho eso porque me impidió rendir mucho más. A los chicos cuando dirijo, lo primero que les digo es que lo peor para un deportista es trasnochar. Tenía la suerte de que no tomaba ni fumaba.

7) Se puede decir que el primer contrato que arreglaste en San Lorenzo, siendo muy chico, fue por una heladera para tu familia.
Nosotros éramos una familia muy humilde, todos laburantes: mi viejo, mi vieja, mi hermana, mi hermano, laburaban todos. Yo también trabajaba cuando tenía 10 años, y en un momento me vienen a buscar porque se enteraron que había un chico que jugaba bien. Había un torneo en el Luna Park y ahí se comentaba que había un zurdo de 10 años que jugaba bien, entonces vino el presidente del fútbol amateur de San Lorenzo. Yo tenía que haber ido a River o a Racing. River me estaba esperando, pero yo era hincha de San Lorenzo aunque me quedaba muy lejos de casa. Entonces vino el hombre, vio mi casa y faltaba una heladera. Nosotros poníamos el hielo en los piletones, no teníamos dinero para comprar la heladera. Y él dijo: "Si el nene firma con San Lorenzo mañana traigo la heladera". Ahí se ganó a mi vieja y a todos. Además ofreció un tratamiento de ortodoncia para mí, porque era dentista.

8) ¿Fuiste amigo de Oscar "Ringo" Bonavena?
Fui muy amigo de Oscar. Nos criamos juntos de pibes. Íbamos a la pileta del Parque Patricios, él era un poquito mayor que yo. Con el correr del tiempo yo jugué en la primera de San Lorenzo y él fue un excelente boxeador, realmente uno de los grandes del boxeo. Un tipo muy simpático... muy simpático. Siempre digo que si viviera hoy estaría en el jurado de Tinelli, no tengo ninguna duda. Vivimos juntos. Una vez fuimos en avioneta a Mar del Plata, el piloto era más loco que él (se ríe) y nos agarró una tormenta de frente. Yo le decía al piloto "volvamos por favor", y el tipo lo mira a Bonavena y le dice: "Ringo, viene una tormenta de frente ¿qué hacemos?" Y Oscar, con el habano en la boca, tirado para atrás -no me olvido más- le dice: "¡Metete en el medio!" (se ríe a carcajadas). Yo conocí dos personajes de una popularidad tremenda: uno fue él y el otro Maradona.

"En una película hice de indio, con John Wayne, y en otra de borracho en un bar, con William Holden"


9) A Maradona lo dirigiste en Boca. ¿Era difícil ser entrenador de él?

No, no, un chico afectuoso, cariñoso.

10) ¿Pero le podías dar instrucciones a Maradona, o tenías que dejarlo que hiciera lo que quisiera?
En una de esas le dabas una indicación de dónde podía estar mejor el partido para ganarlo. Entonces iba y le decía: "Diego tirate un poquito a la derecha" o "tirate a la izquierda que ahí hay un agujero para vos", pero después lo resolvía todo él.

11) También fuiste actor de cine, por un ratito.
Nosotros estuvimos trabajando de extras en las películas que hacían en México, con actores a los que yo veía de pibe: John Wayne, Raquel Welch, Anne Margret, William Holden... Y a veces necesitaban extras, entonces yo fui a trabajar porque tengo pasión por el cine. Actualmente veo dos o tres películas por semana, mi ilusión es tener algún día un cine. Y bueno, ahí me metí de extra: en una me tocó trabajar de indio, con John Wayne, y en otra de borracho en un bar, con William Holden. Me sentí muy bien, muy cómodo.

12) Hay una anécdota con John Wayne que me gustaría que contaras.
Sí, fui a verlo con el "Toscano" Rendo (otro ex futbolista de San Lorenzo). Le dije "vení que te voy a presentar a John Wayne que es amigo mío". Yo hacía de indio en esa película. Entonces le golpeo la puerta y cuando abre me la cierra en la cara. Le digo a Rendo: "Quedate tranquilo que éste me conoce, si estoy todos los días filmando con él". Le golpeo de nuevo y otra vez abre y cierra. Y le digo al "Toscano": "Lo que pasa es que me conoce de indio, de civil no me tiene" (se ríe).

13) ¿Conociste personalmente a Raquel Welch también?
Sí. Una mujer maravillosa, igual que Anne Margret, que filmaba con Elvis Presley. Muy linda. Después la vi en San Pablo, en un show con Shirley MacLaine.

14) ¿Nunca tuviste la ilusión de ser artista?
Lo que pasa es que la pasión mía era jugar al fútbol. Pero en el colegio trabajaba en las obras que se hacían, en todos lados. Me sentía bien pero mi pasión era jugar al fútbol.

15) Alguna vez has dicho, a propósito de los enfrentamientos entre equipos argentinos y uruguayos en la década del 60, que ir por la zona donde jugaba el "Peta" Ubiña era como ir a Vietnam.
(Se ríe) Sí, sí, yo lo decía en broma. Yo les decía a mis compañeros: "No me la tirés ahí que por ahí es Vietnam". Y... jugaban futbolistas extraordinarios: el "Peta" Ubiña, Montero Castillo, Ancheta, "Cococho" Álvarez, Mujica... y en Peñarol también. Peñarol tenía un equipo extraordinario.

16) ¿Llegaste a jugar Copa Libertadores contra ellos?
Sí, jugué contra ellos. Jugué también la Copa América (de 1967) que la ganó Uruguay. Yo estaba en el plantel. Eran partidos muy duros, pero después me hice muy amigo de esa generación de jugadores uruguayos: "Cachito" Silveira... este muchacho... cómo se llama, tan buena persona... Víctor Espárrago. Con "Cachito" Silveira siempre íbamos a comer, él jugó en Independiente y en Boca, un muchacho muy cómico, extraordinaria persona.

"Yo les decía a mis compañeros: ‘No me la tirés por el lado del ‘Peta' Ubiña que por ahí es Vietnam'"


17) ¿Cómo te fue en los enfrentamientos con los uruguayos?

Y, se ganaba y se perdía. Pero jugar en el Centenario era muy difícil. No solamente por la capacidad que tenían los jugadores, sino porque eran equipos de hombres, durísimos, ganar era bravo en Uruguay. Con grandes jugadores de fútbol.

18) ¿Recordás algún roce con alguno?
No, no... por mi forma de jugar, yo era habilidoso y me metían. Pero yo no arrugaba, no te sabía devolver la patada pero no arrugaba, iba siempre al frente.

19) Después dirigiste a varios uruguayos. Tenés un mérito del que se habla poco: fuiste el que puso a Francescoli de "9".
Sí, Enzo acá dejó una imagen extraordinaria, como profesional y como persona. Aparte es querido por todas las hinchadas, un jugador fantástico. Yo decía, cuando hacíamos la pretemporada, que la gente lo miraba a él para verlo cómo trabajaba estéticamente. Era una cosa hermosa cómo saltaba las vallas, la soga, y la gente lo miraba, la verdad que parecía un bailarín de ballet ruso.

20) El viejo periodista argentino Enrique Macaya Márquez decía que jugaba en "puntas de pie".
Sí, y la gente lo iba a ver entrenar. Y otro maravilloso amigo fue Antonio Alzamendi. A Alzamendi la verdad que yo lo adoraba. Las alegrías que le dio Antonio al hincha de River... hizo el gol para ganar la Intercontinental (1986). Y después vino el "Tano" Gutiérrez, que era un jugador del tipo de aquellos de los 60. También un muchacho muy humilde, extraordinaria persona, que hacía dupla con el "Cabezón" Ruggeri y eran prácticamente impasables. Pero he tenido la suerte de dirigir a unos cuantos uruguayos, en San Lorenzo llevé a Navarro y a Bueno, que acá causaron sensación. Y habré dirigido a más, ojo que me olvido...

21) En Boca a Cedrés.
¡A Cedrés y al "Manteca"! El "Manteca" Martínez, un gran jugador. Los dos grandes jugadores y grandes personas.

22) ¿Es muy diferente el futbolista uruguayo que el argentino?
El jugador uruguayo es muy respetuoso y muy educado. Y después, en la cancha, cuando le hablás de la función táctica que uno quiere que cumpla ellos la cumplen. Y después, de entrega ni hablar. Pero lo que yo más noté es que es muy respetuoso.

23) El argentino en general es más técnico.
En líneas generales tiene más... no es que sea más técnico, es de otra formación. En una de esas no es tan táctico, son de otra forma.

"El ‘Oveja' Telch me dijo ‘corré pibe' y yo le contesté: ‘Corra usted que se acuesta a las 8 de la noche... ¡Irrespetuoso!'"


24) ¿Hiciste mucho dinero con el fútbol?

No, en la época mía no se ganaba demasiado. De repente se ganaba como para vivir bien, pero dinero como ahora no. Ahora hacés una transferencia de 5 millones de euros y te salvaste para toda la vida, antes no era así.

25) ¿Llegaste a jugar en Europa?
Jugué en el Sevilla, pero había un problema, eran dos cupos de extranjero y yo fui como tercer cupo y nunca me pudieron habilitar. Por eso nunca pude jugar. Le pasó lo mismo cuando yo era técnico a un jugador mexicano en Boca, que era un crack, Hernández se llamaba: no se abrió el cupo para cuatro extranjeros y por eso no podía incluirlo.

26) Hay otra anécdota con el "Oveja" Tech, un compañero tuyo en San Lorenzo, que en un partido te dijo que corrieras.
Sí (se ríe)... me dijo "corré pibe" y yo le contesté: "Corra usted que se acuesta a las 8 de la noche... ¡Irrespetuoso!" (Vuelve a reírse) Lo que pasa es que ellos sabían que yo era un buen pibe y entonces me bancaban cualquier cosa, y de repente en veinte minutos te hacía dos goles y te definía un partido. Tenía esa condición.

27) En la presentación del libro que mencionaba antes también participó Víctor Hugo Morales, y él allí dijo: "El Bambino volvió de donde no vuelve nadie". Obviamente se refería al asunto que te llevó a la cárcel. ¿De dónde volviste?
No... yo tenía la tranquilidad de conciencia de que no había hecho absolutamente nada. Eso me ayudó a vivir. Una tremenda injusticia que se competió conmigo pero yo tenía la conciencia tranquila y eso fue lo que me ayudó a vivir. Un momento muy malo, difícil de olvidar, creo que nunca voy a hacerlo, pero después cuando salí lo hice con mi conciencia tranquila. Con decirte que volví a dirigir fútbol sin ningún tipo de problema, me metí en todas las canchas y salí campeón con San Lorenzo. Eso fue lo que me ayudó a mí.

28) ¿Qué respuesta recibiste de la sociedad argentina?
Espectacular.

29) Hubo gente que te consideró y sigue considerándote culpable.
Sí, pero en general espectacular. Con el correr de los años se dieron cuenta de todo.

30) Tu defensa en el caso argumentó que no hubo violación...
(Interrumpe) No, lo que pasa es que es un tema que ya está superado. Yo te digo dos cosas: se cometió una gran injusticia conmigo y salí porque tenía la conciencia tranquila. Porque hay gente que se pregunta "¿cómo salió el Bambino?" Y... salí por eso. No había hecho absolutamente nada.

31) Se dijo también que te había sacado de la cárcel el entonces presidente Carlos Menem.
No, para nada, se fijaron en el expediente y dijeron "para afuera".

"Conmigo se cometió una tremenda injusticia pero yo tenía la conciencia tranquila y eso fue lo que me ayudó a vivir"


32) ¿A qué le tenés miedo?

Yo no soporto dos cosas en la vida: la soberbia y la injusticia.

33) ¿Te has enfrentado a muchos soberbios?
Sí, el soberbio, tenga lo que tenga, es un tipo al que no soporto. Soy una persona muy respetuosa, pero si vos sos soberbio, conmigo morís. Es terminante, seas quien seas.

34) ¿Qué edad tenés?
Ahora tengo 66 años.

35) El Bambino Veira que llega a su casa por las noches y se mete en la cama ¿es el mismo que uno ve por televisión o escucha en la radio?
Sí, toda la vida fui así. Yo nací en una familia tanguera, mi viejo tocaba muy bien el bandoneón y mi vieja era una gran bailarina de tango y mi tía una gran cantante. Entonces yo tocaba el bandoneón y cantaba también. Me hacían cantar en todos lados y cantaba bien eh. Yo le decía a Rubén Juárez, un gran cantante argentino, un monstruo: "Rubén, yo tenía que haber sido el sucesor tuyo". Pero la pasión mía era la pelota y yo quería jugar al fútbol. Y dejé todo por el fútbol.

36) ¿Crees en Dios?
Sí, leo la Biblia todas las noches.

37) ¿Qué lees, algo en particular?
Sí, leo los salmos 27 y 70. No es que voy a la iglesia o a la Virgen del Luján, pero Dios está todas las noches conmigo. Soy muy católico y cada desgracia que uno vive, como lo de los inundados acá en la Argentina, me parte por el medio porque es toda gente muy humilde. Y me mata la violencia también. Pero soy muy católico y Dios está comigo todos los días.

"No es que voy a la iglesia o a la Virgen del Luján, pero Dios está todas las noches conmigo"


38) ¿Qué dicen esos salmos que mencionaste?

"Jehová es mi luz y mi salvación, de quien temeré; Jehová es la fortaleza de mi vida". Y así arranco todas las noches, me despido y agradezco a Dios todo lo que me dio en el día. Gracias por protegerme, por proteger a la gente que yo amo... y así fue toda mi vida. Nací en una familia católica y entonces estoy muy metido.

39) ¿Pensás en la muerte?
Por ahora no se me pasa por la cabeza, pero no sé si con el tiempo uno puede evitar pensar en ella.

40) ¿Cómo te gustaría ser recordado por los argentinos el día que no estés?
Y... yo digo que me gustaría ser recordado primero como una persona que dio todo en la vida, de una gran honestidad. Cuando yo voy por la calle la gente me saluda y uno se da cuenta de que lo saludan bien, dicen "ese que va ahí es buena persona". Y eso es lo más gratificante para mí: que la gente piense que el Bambino Veira es buena persona. No hay otra cosa más maravillosa que esa.

Montevideo Portal / Gerardo Tagliaferro
Fotos: Leandro Tagliaferro
Por comentarios: tagliaferro@montevideo.com.uy