La bancada del Frente Amplio se reúne este lunes para definir las modificaciones que se realizarán al proyecto de ley que busca compensar a los cincuentones que se vieron afectados por el cambio en el sistema de seguridad social.

El diputado Gonzalo Civila, que integra al Comisión de Seguridad Social que estudia el proyecto dijo a Montevideo Portal que se viene avanzando en un proyecto que cuenta con el apoyo de todos los sectores de la fuerza política.

Consultado sobre la propuesta del IR, Civila señaló que esa propuesta “resume lo que plantearon varios compañeros del FA”. “El tema de la baja de las comisiones de las AFAPS lo habían planteado el Partido Socialista. Es una propuesta originalmente del PS que ellos tomaron para una propuesta donde incluyen el 90%, más en línea con el planteo del FLS. Por ahí se puede ir encaminando la posibilidad de que los distintos grupos discutan y vean la chance de encontrar la salida”.

Civila dijo que no está cerrado el tema pero se van sumando las propuestas de los diferentes grupos con aspiraciones de llegar a una sintaxis. “Necesitamos hacer esfuerzos para buscar una salida que contemple a toda la bancada, desde los que en principio estamos de acuerdo con el proyecto tal cual vino, a los compañeros que han planteado reparos”, agregó.

El socialista señaló que el sector siempre tuvo una posición crítica con las AFAP, por lo que incorporaron otros temas al debate más allá de los cincuentones: “Nos interesa abordar otras cuestiones para atacar los efectos nocivos que tienen las AFAPs, lo de las comisiones es importante porque tiene un efecto positivo sobre todos los trabajadores que están en las AFAPs.

Consultado sobre la calificación de “burrada política” del presidente del Frente Amplio, sobre la discusión que se generó en la interna frenteamplista, Civila dijo que prefería no hacer comentarios al respecto: “Lo que menos hay que hacer es condimentar esta discusión con dimes y diretes entre nosotros. Las declaraciones públicas entre dirigentes no aportan nada a la sociedad”.

El proyecto de ley que envió el presidente Tabaré Vázquez costará a los contribuyentes 3.649 millones de dólares, lo que implica una pérdida de 0.4 del PBI durante los próximos 25 años. Los beneficiarios serán aquellos trabajadores de ingresos medios y medios altos, que en 1996 ganaban por encima de los cinco mil pesos, unos 8 salarios mínimos nacionales.

El proyecto fue catalogado como “regresivo” por parte de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto al constatar que significaría un retroceso en los avances realizados en materia de equidad. Según el informe presentado por la OPP de aplicarse el proyecto, el índice Gini pasaría de 0.405 a 0.426. Los valores del índice van de 0 a 1, siendo 0 el caso hipotético en que todos los habitantes del país ganen lo mismo y 1 en que un habitante lo gane todo.

Consultado sobre ese estudio de OPP, Civila respondió: “No negamos que estamos hablando de sectores que tienen ingresos medios y en el algún caso medios altos, también somos conscientes que las generaciones más desfavorecidas en el país son los niños, que es donde más hay pobreza. Esto de la regresividad del proyecto porque vierte recursos para sectores que no son los más pobres es un dato objetivo, lo que decimos es que hay una inequidad. Personas con el mismo nivel de ingreso tendría jubilaciones distintas y eso hace a la cuestión de la igualdad. Lo importante es discutir cómo financiamos esto para que no tenga un impacto regresivo”.