ENTREVISTA CON CLAUDIO PAOLILLO

Montevideo Portal / Inés Nogueiras
inogueiras@montevideo.com.uy

¿Cómo te formaste en el periodismo?

Empecé a trabajar en 1978, o sea que voy a cumplir 30 años de periodista. Tenía 17 años cuando entré en El Día, que en aquel momento era uno de los dos principales diarios del Uruguay, y empecé como todo el mundo en esa época en que no existían las escuelas de periodismo. Mi padre había sido periodista de El Día, falleció cuando yo tenía 14 años, de alguna manera fue una víctima de la dictadura, y a raíz de eso me llamaron los entonces directores del diario y me preguntaron si quería probarme allí.

Te ofrecieron trabajar allí, pero ¿habías manifestado algún interés?

No, nada. Yo estaba en sexto de liceo.

¿Qué intereses tenías?

Era jugador de Racing, jugaba en la reserva e iba a pasar a primera división. O sea, lo que hacía era estudiar y jugar al fútbol en forma semi-profesional, esos eran mis intereses. Mi padre había sido periodista, sí, pero eso no quiere decir nada, no quiere decir que sea genético. Entonces me llamaron, me ofrecieron un sueldito en Racing yo no cobraba prácticamente nada, me pagaban el boleto y algún viático. Y eso era un trabajo, mi padre había muerto, mi madre estaba en el exterior, yo vivía con unos primos, en fin, necesitaba un dinero para vivir y ahí había un sueldo.

¿Y cómo empezaste?

Haciendo lo que hacían todos los periodistas de mi época. Empezabas a hacer las cosas más simples y más del fondo del tarro: cubrir un partido de la intermedia, una conferencia de prensa del Club de Radioaficionados, por ejemplo, cosas de muy poca relevancia. Ahí iba yo, y se ve que le empecé a tomar el gusto a esto de escribir.

¿Tuviste en algún momento "una revelación" o lo de ser periodista fue una cosa más construida con el tiempo?

Fue construida, no fue que un día me levanté y dije "esto es lo mío". Durante un mes compartí las prácticas de fútbol y el trabajo, llegaba a las 20:00 al diario y ya era medio tarde para llegar. Entonces el jefe de redacción me dio a elegir "es esto o el fútbol", y el fútbol era una posibilidad en un millón...

¿Te iba bien?

Sí, a mí me gustaba, entrenaba como loco. Pero no existía Paco Casal en esa época, así que mejor que no me decidí por el fútbol, porque no hubiera ganado ningún pase ni nada.

A partir de ahí me dediqué 100% al diario, y con el paso de los meses fui tomándole el gusto, se me despertó la curiosidad por saber, y empecé a proponer notas, las típicas notas de todo principiante: la prostitución, la drogadicción, recorrer los cantegriles. Típicas notas que a uno le parece que nadie las hizo nunca en la historia del periodismo y son las más hechas. Pero ahí empecé a desarrollar una capacidad que se ve que tenía innata, porque nadie me enseñó, y trabajé del 78 al 84 en El Día, además de trabajar en casi todos los semanarios opositores a la dictadura que hubo en el período: Opinar, Convicción, Aquí, etcétera. Mi padre había muerto como víctima indirecta de la dictadura, como periodista de El Día fue proscrito, no pudo escribir más, se cayó moralmente y se murió a los 39 años. Murió de angustia porque no podía creer era batllista- que en el Uruguay de Batlle, de la libertad, no se pudiera decir lo que uno pensaba. Y por eso mismo yo era un acérrimo opositor a la dictadura.

¿Cómo llegaste a Búsqueda?

Llegué después de recorrer una cantidad de medios: además de El Día y los semanarios, trabajé como corresponsal de France Presse en Montevideo cuatro años, trabajé en Radio El Espectador, en la CX30 de Germán Araujo, en Emisora Del Palacio fui cofundador del programa En Perspectiva. Cuando renuncié a El Día fue para irme a un diario que financiaba el Partido Socialista y se llamaba "Tiempo de Cambio". Duró 25 días, se fundió y quedé desocupado, desde agosto del 84 hasta febrero del 85. No pude cubrir periodísticamente las elecciones del 84 porque no tenía para quién trabajar. Hasta que un día se enteraron en Búsqueda y me llamaron a prueba. Quedé, y con el paso de los años me nombraron jefe de información política, años después secretario de redacción, luego editor general y director. Ahora me encargo solamente de la dirección periodística del semanario.

¿Te gusta la tarea?

Me gusta más escribir, lo cual puedo hacer a pesar de que tenga esa otra tarea de coordinación. Tengo una vocación y un gusto por escribir, no es un sacrificio para mí. Siempre digo que soy un privilegiado porque mucha gente trabaja en lugares en que detesta el trabajo en sí, y a mí me gusta venir acá, no siento que sea un sacrificio sino que es un placer. Venir a buscar noticias, a reunirme con los compañeros para ver qué noticias vamos a buscar, y cuando conseguimos una noticia nos sentimos como si hiciéramos un gol.

Ustedes suelen publicar muchas "primicias" a pesar de ser un semanario, ¿a qué lo atribuís?

Búsqueda en un híbrido entre una revista periodística y un diario. Los miércoles de noche nosotros estamos compitiendo contra los diarios de los jueves. No quiere decir que hagamos todas las noticias, pero si el miércoles, como anoche, se reunía el Tribunal de conducta del Frente Amplio y Asamblea Uruguay para definir qué iban a hacer con el caso del contador Bengoa, eso lo cubrimos a muerte igual que los diarios. Y tratamos de hacerlo mejor.

Además están las notas del semanario, que se pueden leer el domingo. Eso lo tenemos bien presente: Búsqueda se lee los jueves, cuando sale, pero mucha gente lo deja para el fin de semana. Por lo tanto debemos cuidar mucho la redacción, inclusive en las notas que compiten con los diarios, de manera tal que puedan leerse el domingo, sin perder el gancho. Pueden ser noticias que ya hayan escuchado todas las personas, pero Búsqueda tiene que tener un ADN propio en la forma de redacción, y sólo las vas a leer de ese modo ahí. Yo lo llamo el ADN, un medio sin ADN, sin identidad, es como un cuerpo sin sangre, una cosa fofa, que va para un lado o para el otro.

¿Cuál sería el perfil del periodista de Búsqueda?

No hay un perfil, porque acá trabaja gente que ha venido de todos lados. El perfil es que sean profesionales, y punto. Después que sean de derecha, de izquierda, del Frente, del Partido Independiente, blancos o colorados no se les pregunta, no nos importa. ¿Qué quiere decir que sean profesionales? En primer lugar, el que entra en Búsqueda no puede tener otro trabajo competitivo. Por ejemplo, no puede trabajar en una radio y en Búsqueda porque ¿a quién es leal? ¿A quién le da la noticia? Tiene que tener exclusividad. Tampoco puede tener un trabajo que signifique la posibilidad de generar un conflicto de interés, porque Búsqueda no está cubierta de que la acusen de tener un periodista que está trabajando en un área que se está cubriendo, y que de repente tiene noticias adversas a ese sector. Por eso nosotros pedimos, y pagamos, exclusividad. Para lo único que no pedimos exclusividad es para trabajar en un medio del exterior no competitivo o en la docencia.

¿Creés que Búsqueda cumple un rol político? Más allá de que no les importe o no les pregunten a los periodistas qué inclinación tienen, el producto final ¿cumple una función política? Porque es visto así de parte de este gobierno.

En Uruguay y en todo el mundo los medios siempre son vistos como cumpliendo un rol político. Búsqueda cumple un rol político en cuanto a la gran y noble acepción de la palabra, es decir: somos miembros de la polis, somos ciudadanos del país, y nuestra función en esta sociedad es tratar de acercar información a la gente, y opiniones también - separando lo que es información y opinión-, para que la gente tome libremente sus propias decisiones. Ahora, un rol político como se atribuye, es decir, una tendencia que busque el poder... porque los partidos políticos cumplen el rol de legislar pero además buscan tener el poder, luchan por eso; nosotros no corremos esa carrera.

Pero no sólo este gobierno lo ve así, en los gobiernos anteriores también. El primer gobierno de Sanguinetti, de 1985 a 1990, durante los cinco años el presidente se ocupó por todos los medios de tratar de desacreditar la información y las opiniones de Búsqueda, diciendo "yo no leo Búsqueda" cada vez que le preguntaban por algo, y en privado también decía que Búsqueda cumplía un rol político contrario a su gobierno. Lacalle también, en su gobierno hubo afirmaciones parecidas y "proscripciones" de periodistas por publicar informaciones que no le gustaban. Lacalle solía invitar a todos los periodistas a fin de año a reuniones sin grabador, y yo fui durante tres años sistemáticamente proscrito de esas reuniones a raíz de notas que publiqué bajo su gobierno.

¿Y con este gobierno hubo alguna diferencia en la forma de trabajar, en la forma que era percibido su trabajo, o se sintieron distintos al encarar el trabajo?

Este gobierno lo ha hecho mucho más explícito, digamos. Hay muchos voceros que repiten lo mismo, pero no cosas distintas de las que te conté antes. Repiten lo mismo, lo que pasa es que son muchos: el presidente, el vicepresidente, varios de los ministros. Y hay un poco más de creencia de un sentido de conspiración permanente, quizá porque es la primera vez que están en el gobierno. Parece que Búsqueda, en particular, está siempre publicando noticias porque hay detrás "otras cosas", no porque el periodista consiga una noticia.

Si publicamos que se reunió el Comandante en Jefe del Éjercito con el ex presidente Sanguinetti y el presidente Vázquez no lo sabía, ahí empiezan las elucubraciones de por qué publicamos esa noticia. A pesar de que el presidente termina de leer la noticia y echa al Comandante, creyendo en Búsqueda. Pero de todas maneras siempre hay eso de "Búsqueda logró su objetivo". ¿Qué objetivo? Nosotros publicamos lo de la reunión. No sabíamos qué iba a ser el presidente, y no teníamos interés de que lo echaran ni que no lo echaran, no nos importaba.

Búsqueda publica que Nicolini se opera con un carnet de pobre y entonces hay un interés de voltear a Nicolini. No lo echa Búsqueda de la banca, lo echa el Movimiento de Liberación Nacional, el MPP. Nadie le puso un revolver a Lucía Topolansky ni le dijo "tiene que echar a Nicolini", ella y sus compañeros resolvieron tomar esa decisión.

Ahora sale el asunto este de (Gonzalo) Nin, y otra vez la conspiración. Pero resulta que el asunto de Nin lo había pasado el presidente a su hermano, para que su hermano lo pasara a la ministra de Defensa. Entonces, ¿es Búsqueda, o es el presidente y el hermano, que mueven la pelota para que eso se ponga a ser investigado?

¿Puede ser que en el caso de Nin los ataques al Semanario hayan sido mayores por el hecho de que la información se basaba en una denuncia anónima?

Lo que pasa es que jamás hubiéramos publicado la denuncia, o un extracto de la denuncia, si no hubiera sido tomada en serio por la Presidencia de la República, al punto tal de que se la entregó formalmente al Ministerio de Defensa. Si no hubiera habido ese trámite, nosotros jamás hubiéramos publicado la nota. Porque denuncias como esa nos llegan decenas, anónimos que descartamos por completo. Pero acá el anonimato había sido subrogado por un trámite oficial. ¿Por qué tramitó un anónimo la Presidencia al Ministerio de Defensa? ¿Por qué no lo tiró, o por qué no se lo dio a Nin y le dijo "mirá lo que están diciendo anónimamente sobre vos"? ¿O la Presidencia sabe quién es el autor y no es anónimo para ella? Yo no lo sé, Búsqueda no lo sabe.

Pero, en general, todas las críticas son parte del juego democrático. El periodismo y el poder político están, en una democracia sana, en permanente tensión. Lo cual no quiere decir que estemos todos los días a las trompadas con los ministros, que los vemos por la calle y los escupimos, ni nada por el estilo, simplemente que las funciones que cumple uno y otro son diferentes. Cuando un periodista tiene noticias, que verifica, que son creíbles e importantes, y que son eventualmente denuncias, una de sus funciones es difundirlas; y muchas de las noticias son cosas que el gobierno no quiere que se difundan.

Así que tampoco hay que asustarse mucho ni creer que las críticas que se hacen desde el poder son tremendas y que vivimos estresados por el asunto. Es parte del juego, que se acepta, y que es sano para una democracia.



¿Te vinculás a los otros medios? ¿Qué papel ocupan para vos?

Básicamente escucho tres radios: El Espectador, Sarandí y Radio Sport, porque me sigue gustando mucho el fútbol. Miro los informativos de televisión, por arriba nomás. No soy muy adicto a los informativos, tienen muchos choques de auto, tienen mucho deporte y no tienen investigación prácticamente propia, son levantes de las noticias de la prensa de la mañana, más las conferencias de prensa del día, todo por arriba, todo un minuto.

¿Trabajarías en televisión?

Trabajaría pero en un proyecto diferente al que está en boga desde hace años en la televisión uruguaya. No trabajaría en un informativo para hacer esto. Está bien que los informativos tienen que tener de todo pero para mí los periodistas tenemos que optar siempre, y en la televisión no se opta, se da todo. Y como se da todo, se da un minuto de todo, o sea que no se profundiza en nada, y el pueblo está superficialmente informado.

¿Y más allá de lo estrictamente periodístico qué opinás de la televisión?

La televisión es una mezcla de información con entretenimiento, pero creo que tiene muy poca información. Los programas periodísticos a veces cambian de horario porque los corre "Gran Hermano" o "Bailando por un sueño", pero es una apuesta de muy corto plazo de los canales. Estarán haciendo ganancias ahora, pero el día en que Tinelli decida no hacer más nada ¿qué queda? A la televisión le faltan programas periodísticos de fondo, aunque sea una hora por semana, algo. Que Tinelli siga saliendo, no hay problema, si eso es lo que mira la gente, pero hay un público que quiere también ser informado.

Desde hace poco Búsqueda existe también en Internet, ¿cómo decidieron dar este paso, y por qué recién ahora?

Fue una larga discusión de varios años, qué hacer en Internet. En el año 98 fui a Estados Unidos a investigar qué estaban haciendo con el nuevo medio en diarios, semanarios y medios de prensa; cómo hacían para no fagocitarse a sí mismos. En ese entonces todos estaban invirtiendo en el sitio online y mi pregunta era "¿cómo les esta yendo, dan ganancias?". No, pérdidas. Me acuerdo de una reunión en el Atlanta Journal Cosntitution, en que le pregunté al director "¿cuánto están invirtiendo?" y me dijo: "Estamos invirtiendo 30 millones de dólares al año". "¿Treinta millones de dólares y dan pérdidas?", le pregunté, y entonces abrió una heladerita, sacó una Coca cola chica, la destapó y me mostró la tapa diciéndome: "¿Saben lo que son 30 millones de dólares para la Corporación Cox? Esto". O sea, nada.

Nosotros en Búsqueda no estábamos en condiciones de poner plata, de invertir en investigación, no éramos competitivos para hacer esto, entonces decidimos dejar que otros investigaran, que hicieran el trabajo, y subirnos cuando la cosa estuviera un poco más clara. Lo que decidimos ahora fue poner un pie en Internet. Estamos. El que en el mundo quiera saber qué es busqueda.com.uy puede ver ahí un producto al cual se puede suscribir.

¿Pero no tienen previsto dedicarse al periodismo online?

No, por ahora. Pero tenemos la cabeza abierta, porque hace diez años yo no usaba celular y vivía feliz y contento, y hoy no puedo vivir sin el celular.¿Qué va a pasar dentro de cinco años? Yo que sé, no lo saben los directores del New York Times, ¿cómo lo voy a saber yo?. No lo sabe nadie. Los cambios son tan rápidos y tan acelerados que es muy difícil pronosticar siquiera si va a subsistir el blog dentro de 5 años, de repente hay otra cosa que ni siquiera imaginamos. Entonces, la actitud nuestra es poner un pie, para estar.

¿Y cómo ves el futuro del periodismo escrito?

El futuro del periodismo escrito está asegurado, lo que no está asegurado es el soporte sobre el cual va a sostenerse. Y a mí no me importa nada eso, no me importa que dentro de 10 años Búsqueda no exista más como papel, porque va a seguir existiendo. Porque el periodismo escrito va a seguir existiendo.

Tengo la opinión de que cuanta más información haya en Internet, más necesarios son los periodistas. Si bien es cierto que Internet es un medio fantástico para que cualquier ciudadano pueda acceder a la información que se le antoje, sin recurrir a la mediación del periodista, también es cierto que el carnicero, el guarda de ómnibus, el bancario, el obrero de la construcción, cuando llega a la casa después de trabajar 8 o 10 horas, no llega con voluntad o ganas de meterse en la página del Ministerio de Economía, por ejemplo, para ver si está allí la declaración del ministro, para leerla toda, y perder todo ese tiempo para ver qué dijo el ministro. Va a seguir necesitando periodistas que le hagan el resumen de las cosas, y va a confiar en aquellos en quienes crea más.

Lo que va a cambiar seguramente es el soporte, y probablemente cambie también la manera de transmitir. Ahora transmitimos por escrito, de repente tendremos que transmitir por audio, por video de repente sale una mano de la máquina y nos tenemos que dar la mano. No sabemos cuáles cambios va a haber, lo que tenemos es la cabeza abierta para ellos.

Montevideo Portal / Inés Nogueiras
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